Cáritas y Manos Unidas, contra el “escándalo” del hambre

Se unen para promover en España la campaña internacional ‘Una sola familia humana, alimentos para todos’


FRAN OTERO | Puede que no lo sepa, pero una de cada ocho personas pasan hambre a diario, el 50% de los que la pasan son agricultores, el 60% son mujeres y la zona de Asia-Pacífico es la que más la sufre. Quizás tampoco sepa que la tercera parte de la comida que se produce en un año se desperdicia, que los precios de los alimentos serán un 140% más altos en 2030 o que el 90% del comercio mundial de cereales está controlado por cuatro multinacionales.

Si ya lo sabía o se acaba de enterar, debe saber también que Cáritas Internationalis, con el apoyo del papa Francisco, acaba de lanzar una campaña global con el lema Una sola familia humana, alimentos para todos, cuyo objetivo prioritario es terminar con el hambre para 2025.

En España, Cáritas y Manos Unidas han unido esfuerzos para promover una iniciativa que se extenderá hasta mayo de 2015, cuando se celebre en Roma la Asamblea General de Cáritas Internationalis. Ambas, con el apoyo de Obras Misionales Pontificias (OMP) y REDES, dieron a conocer la campaña en Madrid el pasado 10 de diciembre, en un acto que concluyó con la participación en una ola mundial de oración que recorrió de este a oeste todo el planeta.

La presentación, que tuvo lugar en la Universidad Pontificia Comillas, contó con la participación de los obispos Alfonso Milián y Juan José Omella, responsables, respectivamente, de Cáritas y Manos Unidas, así como representantes de estas instituciones, además de con la intervención del Papa a través de un vídeo-mensaje.

“Nos encontramos ante un escándalo mundial de casi mil millones de personas. Mil millones de personas que todavía sufren hambre hoy; no podemos mirar a otra parte, fingiendo que el problema no existe. Los alimentos que hay a disposición hoy en el mundo bastarían para quitar el hambre a todos”, dijo Francisco en primer lugar.

A renglón seguido, apeló al compromiso de todos e invitó “a que hagan un lugar en sus corazones para esta urgencia”. “Compartamos lo que tenemos (…) y seamos promotores de una auténtica cooperación con los pobres, para que a través de los frutos del trabajo de ellos y de nuestro trabajo podamos vivir una digna vida. Invito a todas las instituciones del mundo, a toda la Iglesia y a cada uno de nosotros mismos, como una sola familia humana, a dar voz a todas las personas que sufren silenciosamente el hambre, para que esta voz se convierta en un rugido capaz de sacudir el mundo”, añadió.

presentación en Madrid de la campaña campaña Una sola familia humana, alimentos para todos, de Caritas Internationalis y el papa Francisco contra el hambre en el mundo

Presentación de la campaña en Madrid

Del mismo modo, pidió mayor conciencia en la elección de los alimentos, “que con frecuencia se desperdician”, y que “dejemos de pensar que nuestras acciones no tienen repercusiones en la vida de quienes –cerca o lejos de nosotros– sufren el hambre en su propia piel”.

En línea con el Papa, Alfonso Milián afirmó que el hambre es “uno de los mayores escándalos” de la actualidad, pues “hay alimentos suficientes para todos”. En este sentido, apostó por “una economía a favor de las personas” y por “no ser indiferentes ante las angustias humanas”.

En definitiva, que no se aparte la mirada ante los hambrientos, los niños, los ancianos… “Esta campaña nos convoca a intensificar la lucha contra la pobreza y el hambre, movilizando más todavía a los agentes pastorales y a los fieles, así como a todas las personas de buena voluntad, en asociación con otros actores que comparten nuestros valores y nuestras convicciones”.

“No hemos hecho lo suficiente”

Por su parte, Juan José Omella, obispo de Calahorra La Calzada-Logroño, dijo que “si todavía hay hambre en el mundo, es que no hemos hecho todo lo suficiente”. Así, denunció que hoy la persona sigue sin ser el centro de las decisiones políticas y económicas, y calificó de “vergüenza” que todavía haya personas que se mueren de hambre. “Hay hermanos que nacen en la crisis, viven en la crisis y mueren en la crisis desde hace mucho tiempo. Hay que gastar menos y compartir más”, concluyó.

La explicación de la campaña, sus detalles técnicos y objetivos, corrió a cargo de la directora del Área de Cooperación Internacional de Cáritas, Natalia Peiró, y del coordinador del departamento de Manos Unidas, Marcos Gordillo, que señalaron que la implementación del derecho a la alimentación en los países en los que no existe es una medida fundamental y, para ello, se elaborará un anteproyecto marco de ley para promover este derecho y que se utilizará en cada país.

Al margen del trabajo diario, la campaña tendrá momentos importantes en el próximo año y medio. Así, en octubre de 2014, se convocará una semana mundial de acción, que unirá a todas las organizaciones miembros de Cáritas y parroquias con diferentes actos e iniciativas en todo el mundo, mientras que, en mayo de 2015, se celebrará la citada Asamblea General de Cáritas Internationalis, que posteriormente participará en la Expo de Milán.

Puesta en marcha la campaña, serán muchos los que se pregunten qué pueden hacer en su ámbito más cercano; Cáritas y Manos Unidas nos dan la respuesta: “Abrir los ojos, los oídos y el corazón, para comprender las repercusiones del hambre en el mundo. Observa tu propia actitud ante la comida y el despilfarro. ¿Qué podría cambiar? Únete a la ola de oración. Cáritas organizará actos de la campaña en los ámbitos locales. Ponte en contacto con ellas y participa en sus actividades. Únete a ellas en Facebook y Twitter. Esperamos que la proliferación de iniciativas en todo el mundo provoque un tsunami de apoyo al derecho a la alimentación”.

En palabras del rector de la Universidad Pontificia de Comillas, Julio Martínez, anfitrión del lanzamiento de esta iniciativa de ámbito internacional: “Erradicar el hambre es un sueño que pasa por acciones pequeñas”.

En el nº 2.875 de Vida Nueva.

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