José Rodríguez Carballo: “El drama de la Vida Religiosa es que deje de ser religiosa”

Nuevo presidente de la Unión de Superiores Generales

José Rodríguez Carballo ministro general Franciscanos y presidente USG

Texto y fotos: DARÍO MENOR | El gallego José Rodríguez Carballo, ministro general de la Orden de los Frailes Menores, es el nuevo presidente de la Unión de Superiores Generales (USG). Sustituye al salesiano mexicano Pascual Chávez. El franciscano analiza la situación que afronta hoy la Vida Religiosa y Consagrada (VRyC) y recuerda que su mayor problema sería que dejase de ser ella misma, no el envejecimiento o la reducción numérica.

– ¿Qué significa para usted el nombramiento como presidente?

– Supone un mayor compromiso en el trabajo a favor de la VRyC, particularmente la masculina. Es un compromiso que asumo con gozo y como un reto, pues amo apasionadamente la VRyC; no podría ser de otro modo pues es mi vida, y creo profundamente en su actualidad. Por otra parte, en este trabajo no parto de cero. Desde hace años conozco bien la USG en cuanto miembro de su Consejo Ejecutivo y anterior presidente de la Comisión Teológica. Este nombramiento, además, supone un voto de confianza que espero no defraudar. Recibo una herencia rica en iniciativas y en reflexión. La USG lleva trabajando mucho en estos años. A mí me toca ahora recoger dicha herencia y hacerla fructificar, enriqueciéndola en la medida de lo posible.

– ¿Cómo vive el envejecimiento y la disminución en el número de miembros de la mayoría de las congregaciones clásicas?

– Con cierta preocupación, pero no como una obsesión. Preocupación, pues en los países occidentales la disminución es clara y el envejecimiento también, debido, entre otras cosas, al envejecimiento de la población y al secularismo en dichos países. Esta disminución y envejecimiento hace que tengamos que dejar muchas obras en el campo de la educación, de la sanidad y en el campo social; obras que considero todavía importantes y, en muchos casos, necesarias, sobre todo en estos momentos de crisis que estamos viviendo. No obstante, dicha situación no la vivo como obsesión, pues esta “crisis”, en el sentido etimológico del término, como “momento para tomar decisiones”, nos está ayudando a volver a lo esencial, a lo que no es negociable porque afecta a nuestra identidad. El drama no es la disminución y el envejecimiento. El drama estaría en que dicha opción de vida dejase de ser religiosa.

Necesarias lucidez y audacia

– ¿Cómo analiza el momento que vive hoy la Iglesia teniendo en cuenta sus dos milenios de historia?

– La Iglesia, y en ella la VRyC, está viviendo un momento hermoso, ante todo, porque es el momento de Dios. Por otra parte, es un momento desafiante, como en toda transición. No olvidemos que estamos viviendo un cambio de época. Como todo momento de transición, también el nuestro está lleno de desafíos para la Iglesia, ante los cuales se necesitan lucidez y audacia. Lucidez para una lectura atenta de los signos de los tiempos y responder a preguntas tan simples e importantes como ¿dónde estamos?, ¿hacia dónde vamos?, ¿hacia dónde nos empuja el Espíritu? Se necesita también audacia evangélica para dar una respuesta a esos desafíos desde el Evangelio. En cualquier caso, el momento que está atravesando la Iglesia no es peor, ni mucho menos, que los que atravesó en otros momentos de transición.

Más sobre las prioridades como nuevo presidente de la USG, la intercongregacionalidad, el clericalismo en la VR, su papel en la parroquia o cómo llegar a los jóvenes, en la entrevista completa, disponible solo para suscriptores.

Entrevista a José Rodríguez Carballo [íntegra]

En el nº 2.830 de Vida Nueva.

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