Javier Álvarez-Ossorio y Emperatriz Arrobo
F. OTERO | La Congregación de los Sagrados Corazones, en sus ramas masculina y femenina, han elegido el pasado 17 de septiembre a sus superiores generales en el transcurso de sus respectivos capítulos generales, que están teniendo lugar paralelamente en Roma.
En cuanto a la rama masculina, que celebra su 38º Capítulo, el sevillano Javier Álvarez-Ossorio Ramos fue reelegido como superior general, justo en un momento en el que la congregación busca orientaciones concretas para la misión, a partir de las necesidades del mundo y de la Iglesia, “estando especialmente atentos a aquellos que viven en los márgenes y límites de la sociedad”.
Tras su elección, Álvarez-Ossorio confesó sentirse como “una rueda de recambio, ya que las verdaderas ruedas de la Congregación son los Sagrados Corazones de Jesús y de María”. El Capítulo convocó a 45 religiosos procedentes de 20 territorios de los cinco continentes.
Por su parte, las religiosas eligieron a la hermana Emperatriz Arrobo, de la provincia del Ecuador, como superiora general en sustitución de la española Rosa María Ferreiro Cortines. Arrobo se convierte así en la 16ª superiora de la historia de la congregación.
Ambos capítulos se han juntado todos los días para la Eucaristía, la adoración y las comidas. Además, celebraron un congeso sobre la misión en el que intervino el secretario de la CIVCSVA, Joseph Tobin, quien afirmó que “Dios abre hoy puertas a la vida religiosa entre los nuevos pobres, los jóvenes y los que sufren”.
En el nº 2.816 de Vida Nueva.
