F. OTERO | El pasado miércoles 18 de abril, a las 5:00 horas de la madrugada, falleció José Cerviño, obispo emérito de Tui-Vigo, justo una semana después de que fuera ingresado.
Entonces, el Obispado al que pertenece emitió un comunicado en el que el titular, Luis Quinteiro, pedía oraciones a los fieles ante la gravedad de la situación.
Cerviño, de 91 años de edad, vivía “tranquilamente”, según ha explicado el Obispado, con los demás sacerdotes de la residencia Nosa Señora da Guía.
En estos últimos días de su vida, ya ingresado en un centro médico, estuvo acompañado por las personas más allegadas, como su secretario Antonio H. Matías, su familia y el propio Quinteiro. Además, también recibió la visita del otro obispo emérito, José Diéguez, y del arzobispo de Santiago, Julián Barrio.
Nacido en Aldán, en el municipio pontevedrés de Cangas, Cerviño fue el obispo de Tui-Vigo durante 20 años, desde 1976 hasta 1996. Anteriormente, había sido obispo auxiliar de Santiago de Compostela (1968-1975). Precisamente en Compostela fue donde cursó Filosofía y Teología, después de estudiar Humanidades en el Seminario Mayor de Tui. Además, era licenciado en Derecho Canónico por la Universidad Pontificia de Salamanca.
Además de las encomiendas episcopales y previas a estas, José Cerviño tuvo una importante trayectoria en la Archidiócesis de Santiago, donde fue educador del Seminario Mayor, rector del Seminario Menor, canónigo de la Catedral y profesor de Religión en la Universidad de Santiago.
Entre otros cargos, fue presidente de la Comisión Interdiocesana para la Liturgia en Lengua Gallega (1969) y de la Comisión Mixta para el Patrimonio de la Iglesia en Galicia (1985). En la Conferencia Episcopal Española (CEE) fue miembro de la Comisión Permanente, así como de otras comisiones específicas.
En el nº 2.797 de Vida Nueva.
