El nuevo presidente de la COMECE repasa en su Asamblea los desafíos de un continente envejecido
El cardenal de Múnich, Reinhard Marx
J. L. CELADA | El nuevo presidente de la Comisión de Episcopados de la Comunidad Europea (COMECE), el cardenal alemán Reinhard Marx, se ha mostrado convencido de que la Unión Europea (UE) dispone de los medios y el potencial suficientes para superar la actual situación de crisis económica y financiera que afecta al continente.
Así lo manifestó tras ser elegido para el cargo, en el marco de la Asamblea Plenaria de primavera que dicho organismo celebró en Bruselas del 21 al 23 de marzo.
Allí, en presencia de la veintena de prelados participantes –entre ellos, el obispo de Almería, Adolfo González Montes–, el también arzobispo de Munich y Freising recordó que “una crisis global exige una respuesta conjunta”.
Por ello, invitó a redescubrir “el sentido de la acción colectiva y responsable”, condición indispensable para “resolver nuestros problemas comunes”. Y es que, a su juicio, “nos encontramos en un momento decisivo para el futuro de Europa”.
Cambio demográfico
En este 2012, Año europeo del envejecimiento activo y la solidaridad intergeneracional, los miembros de la COMECE han querido dedicar sus sesiones a lo que consideran un gran desafío para los países del continente, dado el rápido incremento de la población mayor de 50 años que se está produciendo en la UE.
Entienden los pastores, sin embargo, que este cambio demográfico, lógica consecuencia de la mejora de la salud, no debe llevarnos a considerar la vejez “como una carga, sino como un beneficio para la sociedad, pues los ancianos están dotados de una experiencia profesional y vital que debe ser transmitida a las jóvenes generaciones”.
“Su voluntad de participar en actividades de voluntariado, de acción cívica y, más concretamente, en el trabajo pastoral en el seno de nuestras parroquias y comunidades eclesiales, es fundamental para el bien común de nuestras sociedades”, defienden desde la COMECE, para la que “el diálogo y la solidaridad entre generaciones es realmente la base del desarrollo humano de nuestras sociedades”.
De ahí que reivindique el apoyo del Estado y otras administraciones públicas para que las familias puedan cumplir su “papel fundamental” en el cuidado de los mayores. Un apoyo que podría traducirse, por ejemplo, en la concesión de permisos remunerados para quienes cuidan a un familiar anciano, que es un modo de “reconocer el valor, también económico, que supone el cuidado de las personas mayores en el hogar”. O que se tenga en cuenta el tiempo pasado en casa para cuidar a un anciano a la hora de calcular la jubilación.
Trabajo y familia
Según diversos estudios sobre el tema, los europeos quieren tener más hijos de los que realmente tienen, por lo que –en opinión de los obispos– se requieren políticas públicas que permitan materializar este deseo: políticas fiscales favorables a la familia, servicios para el cuidado de niños y otras medidas que promuevan “el equilibrio entre vida laboral y familiar”.
Durante la Asamblea, además del cardenal Marx, presidente también de la Comisión de Asuntos Sociales de la COMECE, intervinieron destacadas personalidades del ámbito político, económico y educativo, como el exdirector del Fondo Monetario Internacional, Michel Camdessus; el jefe de la Unidad de Análisis Sociales y Demográficos de la UE, Ralf Jacob; los profesores Giancarlo Blangiardo (Milán) y Franz-Xavier Kaufmann (Bielefeld, Alemania); así como Giancarlo Penza, de la Comunidad de Sant’Egidio, o el observador permanente de la Santa Sede ante el Consejo de Europa, Aldo Giordano.
Días después de concluir su Asamblea, la COMECE recibió la visita de una delegación de obispos de Pakistán, encabezada por el arzobispo de Karachi, Joseph Coutts, que se había desplazado hasta Bruselas para encontrarse con responsables del Servicio Europeo de Acción Exterior y otras instituciones europeas.
Nueva presidencia
En el transcurso de la Asamblea de Primavera de la COMECE, fueron elegidos los nuevos responsables que dirigirán este organismo episcopal durante los próximos tres años.
Ocupará la presidencia el cardenal alemán Reinhard Marx, arzobispo de Munich y Freising, quien sucede en el cargo al holandés Adrianus van Luyn, obispo emérito de Rotterdam.
Acompañarán al purpurado germano, de 58 años, como vicepresidentes: el obispo de Piacenza-Bobbio (Italia), Gianni Ambrosio; el obispo de Oradea Mare (Rumanía), Virgilio Bercea; el obispo auxiliar de Varsovia (Polonia), Piotr Jarecki; y el obispo auxiliar de Malinas-Bruselas (Bélgica), Jean Kockerols.
En el nº 2.795 de Vida Nueva.
