Plan de Consolidacion Integral de la Macarena (PCIM)

El resumen de un panorama social desbordante

Seguramente muchos de nosotros nos hemos preguntado cuáles son las acciones que se han realizado en la región de la Macarena, pues los medios de comunicación con relativa frecuencia emiten información sobre el territorio, debido a que ha sido una región caracterizada por el conflicto armado que se vive allí.

Por medio de este artículo que la revista Vida Nueva ha pedido redacte, quiero dar una visión muy rápida sobre el Plan de Consolidación Integral de la Macarena  (PCIM).
La comisión de Pastoral Social de nuestra Diócesis, ha venido haciendo seguimiento a este programa, por eso la información fundamental de este artículo, la tomé de los datos y del seguimiento que ellos vienen realizando prácticamente este escrito lo hemos elaborado entre los dos.
Inicialmente quiero hacer mención de los aspectos generales del programa, el cual tiene influencia en seis municipios de la Diócesis de Granada en Colombia, estos son: Uribe, Mesetas, San Juan de Arama, Vista Hermosa, Puerto Rico y Macarena desde el mes de octubre de 2007. El PCIM es una acción coordinada de Seguridad territorial, Protección Ciudadana y Desarrollo Económico y Social, que busca establecer condiciones de seguridad, la presencia de las Instituciones del Estado y el desarrollo de la región.
Benedicto XVI estuvo presente en la sesión matinal del sábado 27 y pronunció una breve introducción al tema de este año: la Nueva Evangelización, argumento al que, como es sabido, estará consagrado el próximo Sínodo de los Obispos, previsto para el mes de octubre de 2012.
Para cumplir con su objetivo el Plan cuenta con tres fases:

  • Zonas en consolidación: La gente tiene un mayor conocimiento de las instituciones del Estado y saben como pueden acceder a los programas gubernamentales.
  • Zonas en transición: En esta zona con mayor esfuerzo se ha logrado recuperar la seguridad y ganar la confianza de la comunidad en la institucionalidad, informando sobre el programa para que tome la decisión de participar o no en el proceso.
  • Zonas en recuperación: Son aquellas donde el Estado ha desarrollado acciones en materia de seguridad para el territorio por medio de operativos militares frente a grupos al margen de la ley.

En la implementación del PCIM se realizan las siguientes acciones: protección ciudadana, erradicación de cultivos de uso ilícito, acciones de transición, desarrollo institucional, ciudadanía y gobernabilidad, ordenamiento territorial y derechos de propiedad, infraestructura básica y conectividad, desarrollo social, desarrollo económico y estrategias de comunicación.
Todas las labores implementadas desde el PCIM están organizadas por el Centro de Coordinación de Acción Integral “CCAI”, conformado por delegados de doce (12) entidades del Estado que trabajan en forma conjunta, unificando esfuerzos: Agencia Presidencial para la Acción Social y la Cooperación Internacional (Acción Social), Fuerzas Militares, Policía Nacional, Ministerio del Interior y de Justicia, Ministerio de Protección Social, Ministerio de Educación, Ministerio de Agricultura, Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), COLDEPORTES, SENA, Registraduria Nacional del Estado Civil y Fiscalía General de la Nación.
Las acciones desarrolladas desde el PCIM se ejecutan con recursos del orden nacional, departamental y local, y con la cooperación internacional: Reino de los países bajos, OTI-USAID, Embajada de los Estados Unidos: Misión Militar, Gobierno Alemán: GIZ, entre otros.
Es normal que si nosotros les preguntamos a los funcionarios del PCIM su apreciación sobre este programa, encontraremos que ellos nos transmiten los logros que nos quieren hacer ver, como por ejemplo que hay percepción de confianza entre el Estado y la comunidad porque se ha conseguido el regreso de varias personas que habían salido desplazados a la zona lo que permite manifestar que hay mayor seguridad.
De igual manera afirman, se ha logrado mayor articulación con algunas administraciones locales. Estas están comprometidas haciendo esfuerzos en infraestructura, pavimentación de calles, vías, mejora de colegios, realización de programas para los niños y niñas, la llegada del servicio de electrificación, la conformación de bancos de maquinaria para los campesinos y los esfuerzos para el desarrollo económico impulsando lo productivo en zonas rurales.
Pero si escuchamos a las comunidades, como ha sido el trabajo nuestro, nos encontramos con una realidad bien distinta, pues ellas destacan aspectos como:
En lo relacionado con la infraestructura, ha habido una mejora sustancial como el acondicionamiento de carreteras, entre ellas la que comunica al municipio de Granada con Uribe, mientras que en la Macarena se prevé la construcción de vías de penetración ya que éste se encuentra muy aislado, situación que afecta el crecimiento económico de sus pobladores.
En los otros municipios de influencia del PCIM se han hecho proyectos como puentes, trapiches, dotación de centros de salud, construcción de polideportivos, tecnificación de las fincas a pequeña escala y se están entregando kits a altos costos.
Mirando lo relacionado con el aspecto económico del PCIM, las comunidades dicen que se ha generado gran expectativa ante los proyectos de explotación minera y de la misma manera, se ve como positivo la implementación de algunos proyectos productivos pequeños como el impulso a la siembra de arroz, maíz y el desarrollo de la porcicultura. Los cultivos en este momento solo dan para sostenerse y reinvertir, aun no generan rentabilidad: el caucho y la ganadería son productos con buena demanda que beneficia a toda la familia.
Sin embargo, los proyectos productivos no son pensados desde las necesidades y conocimientos de las comunidades sino desde la perspectiva e intereses del plan.
La organización comunitaria es vista desde la formación de asociaciones productivas, dificultando el buen funcionamiento de la misma y el trabajo comunitario. No hay capacitación y seguimiento a los proyectos productivos desde la base; el personal técnico es muy poco, realiza asesorías puntuales y no tienen asentamiento constante en el lugar donde se desarrollan las propuestas. Los proyectos no han llenado las expectativas de las personas y/o suplido sus necesidades, creando escepticismo en algunas comunidades.
Pasando a la formación y capacitación, lo comentan las comunidades, es que ha gustado la intervención del proyecto de países bajos-FUPAD, con la realización de talleres participativos los cuales en su momento contaron con la participación de los candidatos a las alcaldías municipales. En el municipio de la Macarena, el Plan de consolidación financió la capacitación de 45 jóvenes; 35 en turismo y 15 en otras áreas, brindando una opción de vida, ya que antes no había posibilidad que los jóvenes continuaran estudiando.
Pero por otro lado, la comunidad afirma que en las capacitaciones los funcionarios del PCIM, se preocupan mucho por los registros fotográficos y la recopilación de firmas pero no de una atención con calidad, así como no hay continuidad en los talleres realizados, y se queda solo en la asesoría técnica pero no ayudan en el mercadeo, “muchas veces dejan plantada a la gente: la invitan y no les cumplen”.
En lo que tiene que ver con el orden público y la seguridad, los pobladores afirman que hay percepción de seguridad pues se ve la presencia del ejército y policía apoyando a la comunidad, generando credibilidad y hasta ahora se ha erradicado el 75% del cultivo de coca en municipio de la Macarena.
Sin embargo, hay situaciones menos positivas que afectan a las comunidades como el desconocimiento de sus derechos y la cohibición por parte de actores armados. Por tanto, los pobladores todavía no hablan ni participan libremente debido a la influencia de grupos armados en el territorio.
Por otra parte, siguen teniendo lugar los hostigamientos de la guerrilla lo cual es muy preocupante al igual que el tema de las vacunas o extorsiones económicas que este grupo armado realiza, empleando métodos de intimidación. Otro fenómeno que crece es el de los señalamientos, los cuales se producen porque se presume hay corrupción en el manejo de los recursos a la par con los desplazamientos y la violación sistemática de los derechos humanos, son algunos de los flagelos a los que las comunidades se enfrentan diariamente.
En lo que tiene que ver con la estrategia de recuperación y control del territorio por parte de las fuerzas militares, se han cometido algunos atropellos contra las comunidades: señalamientos de colaborar con alguno de los actores armados, amenazas, enfrentamientos y hostigamientos cerca a centros poblados, riesgo y reclutamiento forzado de menores, entre otros, situaciones que causan desplazamiento.
Es preciso decir que quienes se benefician con los programas del PCIM, quieren el proceso aunque estos no son de carácter integral; sin embargo, no quieren la capacitación ni el seguimiento de actividades.
Por otra parte, una de las dificultades en la estrategia del PCIM a nivel institucional es que los recursos vienen con destinación específica y muchas veces no se acomodan a la realidad y a las necesidades de las comunidades. Cuando se empezó a trabajar en el tema de cooperación no se socializó con los gobiernos departamental y local, ni se concertó algún tipo de coordinación entre programas e instituciones existentes en la zona.
Las comunidades piensan que se debería dar importancia al campesino para que los recursos se queden en ellos, se tiene la impresión que contratan muchas personas y que el recurso se queda en contratación de técnicos, “se hace más inversión en la contratación del personal que en las obras propiamente”. También se tiene la sensación que toda la plata se le invierte al ejercito, es decir, todo se queda en el apoyo militar, aunque ellos han realizado algunas brigadas especialmente a las personas más necesitadas.
Se percibe un desfase entre el dinero que esta invertido y la calidad de las obras realizadas un ejemplo de ello es la construcción de unos boxculver pero no les colocaron vías de acceso.
No hay una suficiente socialización de los proyectos como tampoco se muestran los procesos de licitación que ha habido para escoger las empresas donde se realizan las compras. En la rendición de cuentas se muestran cifras, pero no los procesos de compras ni a quién se les compra.
Otro álgido aspecto es el programa de titulación de baldíos, que avanza con dificultades. La propuesta “plan piloto de titulación en tres veredas del municipio de Vista Hermosa: Buenos Aires, Palestina y Albania”, se extendió en una segunda fase a nueve veredas más: Cristalina, Porvenir, Guapaya Bajo, Balastrera margen derecha, Balastrera margen izquierda, Puerto Lucas margen derecha, Puerto Lucas margen izquierda, Talanqueras y Los Andes. Después de superar algunas dificultades como el levantamiento indebido de la medida de protección de tierras, realizar los respectivos planos topográficos y los planes de manejo ambiental, aún no se han hecho efectivo los títulos ya que existen algunos inconvenientes entre las oficinas de INCODER y Catastro ante trámites realizados por INCORA tiempo atrás. Es necesario realizar un estudio minucioso en la documentación existente en estas oficinas para evitar una doble titulación, aspecto en el que se trabaja en estos momentos.
De la información recolectada se puede concluir que al PCIM le falta mucho camino por recorrer para dar un parte satisfactorio de trabajo, esto si se tiene en cuenta el alto costo que se ha tenido que pagar en cuanto a compromiso económico internacional, explotación de recursos naturales y violaciones de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario.
La comunidad ha tenido contacto en los últimos años con la institucionalidad y se encuentran ambas en un proceso de reconocimiento y adaptación a las dinámicas de unos y otros.
Del mismo modo, resulta contradictorio hablar de creación de confianza de la comunidad en el Estado cuando aún se dan actuaciones arbitrarias de parte del ejército y la policía como empadronamientos, bombardeos, fumigaciones y desplazamientos por la violencia cuya información es suministrada por la población víctima de la violencia entre ellos los afectados que tuvieron que salir de la zona.
Igualmente, no crean confianza alguna los múltiples fenómenos de corrupción y mal manejo administrativo que se han dejado ver y que por el contrario refuerzan el discurso de los grupos armados al margen de la ley.
Es preocupante el hecho de que los resultados positivos que la comunidad le encuentra a las actividades del PCIM, sean aquellas que suponen inversión en infraestructura y vías de comunicación. No se quiere restarles importancia, pero es necesario que las acciones vayan más allá y trasciendan en un sólido trabajo comunitario y la de la vivencia de un Estado Social de Derecho.
Los campesinos piden inversión para el campo y atención ya que existe mucha desnutrición y se ve pobreza en general.
Es importante para próximas intervenciones del PCIM tener en cuenta las siguientes apreciaciones:
Escuchar y tener en cuenta las propuestas de las comunidades, pues ellos más que nadie conocen sus necesidades y su forma de trabajar.
Fortalecimiento a las organizaciones de base ya existentes antes de crear unas nuevas.
Incentivar los cultivos de pan coger con los proyectos productivos, garantizando la soberanía alimentaria de las comunidades y la comercialización de sus productos.
Concientizar a la comunidad de la importancia de los fondos rotatorios, siempre y cuando los bienes que se entreguen tengan un valor real y puedan ser reembolsados sin una lesión a los intereses del beneficiario, pues lo que ha pasado es que se entregan valores inflados que resultan injustos para que el campesino los restituya.
Garantizar la protección de los Derechos Humanos, especialmente los civiles y políticos ya que desde la escucha a la comunidad afectada y rural, se puede evidenciar graves violeciones a los derechos de la vida, la libre expresión y movilización.
Garantizar un acompañamiento técnico y con miras a la sostenibilidad de los procesos.
Socializar los proyectos, rendir cuentas a la comunidad y dar participación a las juntas de Acción comunal.
De esta manera hemos dado una visión rápida sobre el Plan de Consolidación Integral de la Macarena (PCIM), resaltando lo positivo que en sí ha podido ofrecer y señalando las falencias que tiene. Pero en lo que más queremos llamar la atención es en los siete puntos finales, pues es ahí donde nosotros creemos se debe colocar toda la fuerza, para que el Plan de Consolidación Integral de la Macarena, logre cumplir con su objetivo de establecer una auténtica consolidación integral que lleve al desarrollo, promoción y respeto a la dignidad de la persona humana. VNC

Compartir