Unicef busca más alianzas con otras religiones para pensar la niñez desde lo ecuménico
Apoyados por la Unicef y con espíritu ecuménico, la Iglesia Cristiana Menonita lideró una jornada de oración con y por los niños, en comunión con otras confesiones religiosas y con la participación de delegados de esta organización internacional en Colombia.
La iniciativa tiene su inspiración en la Red Global de Religiones a favor de la Niñez (GNRC), organización que declaró en 2002 la integralidad y necesidad de exaltar la niñez del mundo sin diferencia alguna. A partir de entonces, la misma entidad ha venido trabajando con distintas organizaciones en las que se destaca Visión Mundial, así como las diferentes iglesias que en el marco de su trabajo social, contemplan acciones orientadas al desarrollo físico y social de niños desprotegidos. Ello con el propósito de excluirlos de la guerra y de toda forma de explotación o abuso físico y sicológico.
Por tradición, la GNRC realiza un cierre cada fin de año con una jornada en la que además de actividades lúdicas y pedagógicas con niños incluye un gran momento de espiritualidad que excluye las diferencias de credo.
Después de que se realizara toda una serie de talleres y campamentos, se gestó la jornada de oración, que se concretó el pasado 19 de noviembre en uno de los templos de la Iglesia Menonita en el sector de Ciudad Berna en el sur de Bogotá. Ese día medio centenar de niños se expresaron pintando, actuando y exponiendo ejemplos de actitudes y conductas en adultos que deben ser rechazadas y denunciadas.
Héctor Buitrago de Aterciopelados hizo reflexionar con su música
Ana Ruth Caicedo, coordinadora de la GNRC para Colombia, explicó que el impulso de este espacio “día mundial de acción y oración por y con los niños” se realiza desde hace tres años en noviembre con el objetivo de enmarcarlo con la declaración de los derechos del niño (20 de noviembre).
“Hicimos talleres con los mismo niños sobre cómo transformar la violencia en caminos de paz, después hicimos un tiempo de música, luego se exhibieron videos sobre este día en el mundo, posteriormente se hicieron presentaciones, después cerramos el espacio compartiendo alimentos y por último realizamos la jornada de oración”.
En efecto, en el desarrollo de esas expresiones, los niños asistentes cuyas edades oscilaban entre los 11 y 13 años, expusieron con carteleras y dibujos en acuarela esas expresiones y conductas tan comunes como lesivas y que recuerdan tristes anécdotas de generaciones anteriores. “Cuando el rabo quiere fuete, él mismo lo solicita”, “la letra con sangre entra”, “ver, oír y callar” entre muchas muestras de voces represoras, que violentan la percepción de un menor. Una de las conductas cuestionadas en adultos maltratadores fue la de aquellos momentos en que el niño cuestiona “por qué” y se encuentra con lemas como “en boca cerrada no entran moscos”. Se habló igualmente de las diferencias sociales que se desarrollan en razón de su ubicación geográfica. Los niños que están en lo plano de la ciudad, llegan a considerarse de mejor clase que quienes viven en las laderas o montañas y a poca distancia de los primeros. “El simple acceso a un parque de la zona o la posibilidad de áreas verdes es ya un factor diferenciador que las propias familias les infunden”, explicó otra coordinadora presente en la jornada.
Por su parte, Eduardo Gallardo, especialista en protección y funcionario delegado de la UNICEF, presente en la jornada, expresó que “aunque se da en todo el mundo, quisiéramos que fuera una iniciativa mucho más grande; esto da un valor simbólico muy importante en la medida en que se piensa la niñez de una manera ecuménica. Esperamos expandir esta alianza con otras religiones, fundamentalmente en el trabajo social, de apoyo y protección a niños y que estas iglesias están en condición y posición de ayudar”. Agregó que “lamentablemente en países como Colombia esta no es la excepción sino más bien la regla: niños que viven en condición de pobreza”.
En la jornada participaron representantes de las iglesias católica, menonita, metodista, budista, bajai e islámica. VNC
TEXTO: J. Escobar
FOTO: Patricia Torres
