Ciudad Rodrigo celebra su historia mirando al futuro

Raul Berzosa, Julian Lopez, Antonio Ceballos, Atilano Rodríguez - obispos Ciudad Rodrigo

La diócesis más pequeña de España conmemora el 850º aniversario de su fundación

Raul Berzosa, Julian Lopez, Antonio Ceballos, Atilano Rodríguez - obispos Ciudad Rodrigo

El obispo de Ciudad Rodrigo, Raul Berzosa, y sus antecesores Julian Lopez, Antonio Ceballos y Atilano Rodríguez

ROBERTO RUANO ESTÉVEZ. Foto: DELEGACIÓN DE MCS DE CIUDAD RODRIGO | Con el lema Para servir mejor… sigue diciendo sí a tu Iglesia. Eres corresponsable, la Diócesis de Ciudad Rodrigo ha vivido con enorme gozo la celebración de su 850º aniversario. Un fin de semana, el del 11 al 13 de noviembre, repleto de actos litúrgicos y culturales para rendir homenaje a la diócesis más pequeña de España en su larga y rica historia eclesiástica.

Raúl Berzosa, obispo de Ciudad Rodrigo, ha destacado la masiva participación de fieles en todos los actos y el apoyo de todos los obispos de la Provincia Eclesiástica de Valladolid, así como de los tres pastores vivos que rigieron antes que él la diócesis: Antonio Ceballos, Julián López y Atilano Rodríguez. De gran importancia para todos los diocesanos, ha sido el mensaje enviado por el Papa, a través del nuncio Renzo Fratini, en el que les alentaba a “crecer en la fe, la esperanza y la caridad”. Gestos repletos de comunión eclesial acogidos con gratitud por todos los mirobrigenses.

Un espectáculo de palabra, música e imagen, El ayer, el hoy y el mañana de nuestra diócesis. Memoria, narración y profecía, dirigido por el director de cine y delegado de Juventud, Pablo Moreno, suscitó la reflexión sobre el pasado glorioso y el futuro, para algunos incierto, de la diócesis.

“Estamos en manos del Señor”, declaraba Berzosa a Vida Nueva. “Desde un punto de vista sociológico, es una grave preocupación en estas tierras la despoblación y el envejecimiento de sus gentes, por un lado, y la falta de trabajo de los jóvenes, que deben emigrar masivamente, por otro. Siendo una tierra tan interesante, la perspectiva de futuro ofrece un cierto panorama sombrío. Desde la fe, con la esperanza firme y con el motor del amor, la realidad puede contemplarse con otros matices más optimistas. Como la Iglesia la conduce el Espíritu Santo… estamos confiados en sus destinos. No somos nadie para poner límites a la Providencia y a sus designios”, respondía el prelado.

Expectativas cumplidas

Todas las expectativas se cumplieron, y la catedral de Santa María se quedó pequeña para acoger a los fieles que, procedentes de los siete arciprestazgos, participaron en la eucaristía. En los actos conmemorativos también estuvo José Sánchez, obispo emérito de Sigüenza-Guadalajara, que ahora reside en su localidad natal de Fuenteguinaldo, Diócesis de Ciudad Rodrigo.

En el nº 2.777 de Vida Nueva.

Compartir