Estado, ONG e Iglesia reactivan alertas por invierno

Coordinadamente se proponen mejorar la atención en futuros desastres

Después de evaluar en perspectiva las proporciones de la catástrofe invernal vivida en tres cuartas partes del territorio nacional, organismos como la Cruz Roja, la Dirección de Gestión del Riesgo del Ministerio del Interior, representantes de Ong y la unidad de emergencias del Secretariado Nacional de Pastoral Social (SNPS) acordaron en el marco de un foro coordinarse más y mejor en materia de respuesta a los eventuales afectados frente a la ola invernal que se espera a finales del presente año en distintas regiones.

Esa fue la primera intención y la más importante que identificaron quienes participaron del foro realizado en la Conferencia Episcopal de Colombia el pasado 18 de agosto.
La eventualidad de nuevas emergencias no es ajena a la unidad de coordinación de emergencias de la SNPS. Desde esa unidad es desde donde se han venido coordinando las acciones de la Iglesia hacia todo el territorio colombiano, para no solo acompañar, sino ayudar a rescatar a las familias afectadas por la pasada ola invernal, que aún cobra consecuencias y de la que también ha sido afectada la propia Iglesia en parroquias y capillas ubicadas en las áreas más recónditas del país.
“Desde allí se atiende y se acompaña todo un proceso psicosocial de fortalecimiento comunitario y educación para el riesgo, de manera que nosotros también estamos buscando no trabajar aislados sino coordinadamente, con estrategias de unión con otras organizaciones de socorro. Esto hace que la calidad de la atención mejore en aspectos de educación, salud, cobijo y seguridad alimentaria, la cual va más allá de la sola entrega de mercados”, comentó Jorge Alfonso Hernández coordinador de emergencias en la SNPS. A este respecto se cuentan diversos procesos productivos con gente que tiene la posibilidad de sembrar, de tener pie de cría y de trabajar sobre pequeñas microempresas.
En relación con un balance político, las voces son más severas al evaluar la respuesta.
“El Estado y varias entidades se han quedado cortos, no se ha podido asumir el tema como se debería. Aún nos hace mucha falta la coordinación en terreno. Creo que no se han tomado las medidas necesarias para prevenir que nuevas situaciones nos cojan de manera tan fuerte en causas y consecuencias, aunque hay que decir que el Estado ha hecho mucho… pero todavía falta”. El mismo representante admitió que aún es latente el peligro de la politización de la ayuda en general. Agregó que “el tema de la corrupción no va a desaparecer de un día para otro”. El obstáculo se presenta justo en la coordinación interinstitucional con gobierno y administraciones locales. “La Iglesia en su propia estructura no ha tenido problemas en el manejo y administración de las ayudas”, manifestó Hernández.
Por su parte, el director de Gestión del Riesgo del Ministerio del Interior, Carlos Iván Márquez defendió la política que en materia de recursos y estructura se ha venido logrando desde el Estado, no obstante aceptó la existencia de ciertas debilidades. “Hoy tenemos una coyuntura importante y es el proyecto de ley que cursa desde hace unas semanas en el Congreso donde se adopta una política integral de la gestión del riesgo conectado a lo nacional como a nivel internacional”. Agregó que “lo que hay que hacer son esfuerzos por mejorar y eso atañe a todos y que es mejor llegar de manera unida y no separados; al unísono un sistema funciona mejor. La Iglesia ha sido un actor muy importante en esto por su cercanía a la comunidad y eso genera efectos muy positivos”, concluyó. Asistentes y representantes al encuentro aceptaron la necesidad de nuevos acercamientos para discutir en detalle mejores formas de trabajo interinstitucional. VNC
TEXTO: J. DE FRANCISCO
FOTOS: TROSKILLER

Compartir