São Paulo espera ya la Cruz de la JMJ

El 18 de septiembre llegará a esa Archidiócesis, de donde partirá en peregrinación por las 274 diócesis de Brasil

Júbilo en Madrid tras la designación de Río 2013

GRAZIELA CRUZ. BRASIL | Con gran entusiasmo, los jóvenes brasileños que asistieron a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Madrid, recibieron el anuncio oficial de Benedicto XVI de que la próxima edición se celebraría en Río de Janeiro, en 2013. Pocos días después, el Papa anunció el lema de la misma: “Id y haced discípulos de todas las naciones”, una cita del Evangelio de Mateo.

Todavía en Madrid, poco después del anuncio, el presidente de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB) y arzobispo de Aparecida, el cardenal
Raymundo Damasceno Assis; el arzobispo de Río de Janeiro, Orani João Tempesta; y el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Juvenil de la CNBB, Eduardo Pinheiro, hablaron a la prensa sobre las expectativas eclesiales de ese evento.

El presidente destacó la organización de la Iglesia en América Latina a través del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y habló sobre trabajar juntos para tener la mayor cantidad posible de jóvenes del continente. Según Damasceno, el trabajo ha de ser más intenso, pues la Jornada se ha adelantado un año debido al Mundial de Fútbol que Brasil acogerá en 2014. El cardenal también subrayó que América Latina es el continente con el mayor número de católicos, y estimó que la Jornada “traerá grandes frutos, no solo para los jóvenes en Brasil”, sino para todos los países de la zona.

Para monseñor Pinheiro, “la JMJ en Río de Janeiro mostrará una Iglesia viva, creativa, en parte por los jóvenes. Estos, con su creatividad, harán que tengamos una hermosa Jornada para todo el mundo”. “El proyecto –añadió– tendrá una dirección misionera con la prejornada, que consistirá en una semana misionera, y la peregrinación de la Cruz, que deberá ser recibida por las diócesis con espíritu misionero”.

Los obispos prefirieron no decir cuántos jóvenes esperan en la JMJ, pero ya conocen la gran disponibilidad y buena voluntad del Gobierno para acoger el evento. Confirmando esta expectativa, asistieron a la clausura de la JMJ de Madrid el alcalde y el gobernador de Río de Janeiro, Eduardo Pases y Sergio Cabral, respectivamente. Paes aseguró que ese acontecimiento “será tan impactante que reunirá a más personas que el Mundial de Fútbol”.

“La gente que he visto en la eucaristía de clausura en el aeródromo de Cuatro Vientos y la que salió durante aquellos días a las calles de Madrid me hace pensar en las proporciones que tendrá una reunión similar en Río, teniendo en cuenta la fe de nuestro pueblo”, añadió el alcalde.

Fiesta de bienvenida

Simbólicamente, los jóvenes españoles dieron a los brasileños la Cruz peregrina de la JMJ, que llegará a São Paulo el 18 de septiembre, de donde partirá en peregrinación por las 274 diócesis del país. La Archidiócesis de São Paulo está preparando una gran fiesta de bienvenida, un gran espectáculo que reunirá a lo largo de ese día, en el Campo de Marte, a varios cantantes a la espera de la Cruz, que llegará en torno a las 16:00 horas.

En São Paulo permanecerá hasta el 31 de octubre, de donde partirá para recorrer el país. En marzo de 2013 llegará al Valle de Paraíba, última parada antes de ser recibida en Río de Janeiro.

Según el asesor para el Sector de la Juventud de la CNBB, Antonio Ramos Prado (Padre Toninho), la visita de la Cruz trae consigo una llamada misionera: “Lleva a los jóvenes a reflexionar sobre la vocación y el discipulado de Cristo. Durante su permanencia en Brasil, serán promovidas tres importantes conferencias en las diócesis. La primera, sobre bioética, tema que todavía necesita ser tratado para nosotros los católicos. El otro seminario será sobre comunicación, y se abordará el uso ético de las redes sociales. Por último, ya cerca de la celebración de la JMJ, se analizará el tema de la misión. Esperamos que haya una continuidad de la evangelización a la luz de la experiencia con la Cruz”, dijo el Padre Toninho.

En el nº 2.766 de Vida Nueva.

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