Las Jornadas Nacionales de Migraciones buscan conocer la religiosidad de origen
MIGUEL ÁNGEL MALAVIA | Como explican los misioneros, el mejor modo de ofrecer el Evangelio a las personas es inculturarse en su propio contexto, conociendo su lengua, costumbres y formas celebrativas. Sin embargo, ¿qué hacer cuando esas personas se ven obligadas a abandonar sus países para llegar hasta el nuestro, marcado por una cultura propia? Es lo que han tratado de responder los delegados y agentes diocesanos de Migraciones en sus XXXI Jornadas Nacionales, celebradas entre el 23 y el 25 de mayo en Ciempozuelos (Madrid).
El mismo día de la inauguración, el director del Secretariado de la Comisión Episcopal de Migraciones, José Luis Pinilla, explicó a los medios que, con el fin de que surgieran “propuestas operativas que llevar a la práctica”, las ponencias y coloquios de esta edición iban a buscar conocer “la experiencia de la religiosidad [que el inmigrante mantenía] en su Iglesia de origen”.
De este modo, para profundizar en la forma en que se vive y celebra la fe en distintos contextos, ofrecieron sus ponencias el arzobispo de Tánger, Santiago Agrelo (que habló sobre África); el delegado de Migraciones de Toledo, Mariano Merchán (Latinoamérica); y el responsable de la Comunidad Católica Rumana en la Delegación de Migraciones de Zaragoza, Ionel Jicmen (Europa del Este).
A través del conocimiento de estas realidades, compartidas por todos los delegados diocesanos, se busca la “integración plena” de los inmigrantes en las comunidades cristianas. Como resaltó Pinilla a Vida Nueva, esa normalización es tal que, en ciertos contextos, los musulmanes colaboran en el día a día de las parroquias.
Voto xenófobo
Por otro lado, pese a que el obispo de Albacete y presidente de la Comisión Episcopal de Migraciones, Ciriaco Benavente, expresara en Vida Nueva su deseo de que los inmigrantes no fueran “instrumentalizados” en el debate electoral, los resultados de las municipales y autonómicas han arrojado el crecimiento en votos (incluso obteniendo concejalías) de partidos xenófobos en varios puntos de España. En las jornadas, tras mostrarse preocupado, reiteró que “los inmigrantes son un verdadero regalo”, contribuyendo a “construir comunidades fraternas” y a “renovar la fe de nuestras iglesias”.
En el nº 2.755 de Vida Nueva.
–
INFORMACIÓN RELACIONADA
- Los inmigrantes, en el centro del debate electoral
- “No existe una sociedad española solo con españoles”
- Entrevista: Ciriaco Benavente, presidente de la Comisión Episcopal de Migraciones: “Se busca señalar a los inmigrantes como el chivo expiatorio”
