Educadores católicos estudian el tema del suicidio en jóvenes

Ofrecen herramientas a padres y profesores para evitarlo

Después de realizar sondeos y consultas entre educadores y padres de familia sobre el tema que debería tratarse en la séptima versión del Congreso de Educadores Católicos, que anualmente organiza el Departamento de Educación y Cultura de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC),  la respuesta fue: el suicidio.
El siquiatra e investigador Víctor Salamanca ha publicado que en Colombia, en promedio por cada 100 mil jóvenes seis se quitan la vida y que de cada tres jóvenes que se suicidan, dos son hombres.

Este fenómeno será en consecuencia, el eje  de las  exposiciones, disertaciones y discusiones académicas que se desarrollarán los días 18, 19 y 20 de mayo en la sede de la Universidad San Buenaventura en Bogotá.  Están confirmados como ponentes en este evento los especialistas  Miguel de Zubiria Samper, director de la Fundación Alberto Merani que trabaja con niños y jóvenes con tendencias suicidas; Juan Carlos Jaramillo, Director científico de la Facultad de Psicología del C.E.S, quien ha investigado el tema con más de 1.000 jóvenes; el sacerdote Carlos Justino Novoa, teólogo y especialista en fenómenos juveniles; Fabián Sanabria, antropólogo y decano en la Universidad Nacional, quien se ha acercado en distintas oportunidades a la problemática del suicidio.
También participará como ponente uno de los organizadores de la jornada,  el sacerdote  Héctor Lugo García, quien abordará el tema desde el cambio paradigmático de las sociedades y el fenómeno del suicidio juvenil. El mismo religioso explicó que la razón  más importante para realizar este congreso es “el compromiso con la VIDA, el que justifica que nosotros como creyentes y primeros responsables de la formación de los niños y los jóvenes, sembremos un profundo amor por la vida y un compromiso con ella en todos los niveles”.
Expresó igualmente que “nos urge tomar conciencia de este fenómeno que está golpeando a nuestra sociedad, fenómeno del cual o no somos lo suficientemente conscientes o no queremos aceptar que está creciendo en el seno de nuestras familias y de nuestras instituciones educativas, incluyendo la universitaria”.
Al referirse a las causas del fenómeno el padre Lugo dijo: “inquieta que los niños y los jóvenes colombianos al dejar de soñar y de tener sentido de sus vidas, terminen con ellas muchas veces por cosas que podrían ser perfectamente resueltas en el diálogo con los padres de familia y con los maestros”. “Nuestros niños y jóvenes están desolados; no se sienten acompañados por sus padres; no experimentan la cercanía de muchos de sus maestros y maestras; tienen miedo a estar solos y puesto que nos les hemos enseñado a entender el amor muchas veces las rupturas amorosas de sus primaverales años los llevan al desespero y la angustia. Los niños y jóvenes que intentan suicidarse o de hecho lo hacen no son precisamente aquellos que sufren graves trastornos mentales o son adictos a tantas cosas, son los que aparecen normales pero que comienzan a cambiar sus comportamientos ante la hipocresía y la corrupción de los adultos o de sus mismos parches”.
El propósito final será el de ofrecer las mejores herramientas pedagógicas y prácticas tanto a padres como a maestros para prevenir un fenómeno que está entre las primeras causas de muerte en la población entre los 14 y 25 años de edad. VNC

TEXTO: E. GARCÍA
FOTOS: JOE HOUGHTON, KNSMR

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