El CELAM mira al futuro con la Misión como guía

Reunión de secretarios de los episcopados del continente para preparar la Asamblea de mayo

JIMMY ESCOBAR G. BOGOTÁ | Del 15 al 17 de marzo, los 22 secretarios generales de los episcopados de América Latina y el Caribe se reunieron en Bogotá para preparar la Asamblea Ordinaria que el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) celebrará en Montevideo del 17 al 21 de mayo. Preguntados por escrito sobre cuáles son los retos pastorales ante la actual situación económica, social y política en sus respectivos países, los participantes en la cita coincidieron en señalar siete temas que hoy preocupan a la Iglesia del continente: la vida, la violencia, el narcotráfico, el desempleo, la pobreza, la deuda y la consolidación de la democracia.

Se trata de siete aspectos que se recogerán a modo de síntesis en el documento que se llevará a la capital uruguaya, para que, una vez elegidos los nuevos cuadros directivos y la nueva presidencia del CELAM, se aborden y se conciban los respectivos planes con unos criterios y directrices comunes.

“Hemos venido trabajando desde el año pasado sobre los principales problemas que aquejan a nuestros países y regiones, y hemos visto que nos plantean una serie de desafíos”, reconoció el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Víctor René Rodríguez Gómez. Por eso, a su juicio, “la Asamblea de mayo deberá contemplar dentro del Plan Global las respuestas que tenemos que ir dando como Iglesia latinoamericana y en cada uno de nuestros respectivos países, teniendo en cuenta dos elementos importantes para la comunión eclesial: por un lado, la solidaridad entre las distintas conferencias episcopales y, por otro, la subsidiariedad para que ese Plan Global sea un instrumento al alcance de todas ellas y puedan tomar los recursos que nos brinda el CELAM (centros pastorales de formación, de observación y reflexión) para aplicarlos en nuestros países”.

Las jornadas de trabajo se desarrollaron en torno a cuatro bloques. El primero se centró en la Misión Continental, un mandato de Aparecida que “la siguiente presidencia del CELAM tiene que retomar en el próximo cuatrienio”, sostuvo el secretario general de este organismo y obispo auxiliar de Guadalajara, José Leopoldo González. El segundo tema objeto de estudio fue la exhortación apostólica Verbum Domini sobre la Sagrada Escritura, porque la Palabra de Dios “es un eje transversal de Aparecida”, explicó el prelado mexicano.

A continuación, se examinaron algunas orientaciones y propuestas de renovación del CELAM, con la Misión como gran eje temático del Plan Global para el próximo cuatrienio. Finalmente, se detuvieron en la preparación de la Asamblea de mayo, donde se presentarán los informes del actual cuatrienio (2007-2011) y se elegirán los nuevos directivos para 2011-2015.

La vida, eje transversal

¿Y todo eso para qué? “Para que nuestros pueblos en Jesucristo tengan vida, de manera que la vida será un eje transversal del próximo cuatrienio”, respondió el propio obispo. Un tema, el de Jesucristo, camino, verdad y vida, al que quieren dar continuidad. Luego se verá “si la estructura actual va a ayudar o habrá que hacer reajustes”, algo a lo que dedicaron su último día de sesiones. Porque, “para que un Plan Global esté al alcance de todas las conferencias episcopales de América Latina –advirtió, por su parte, el secretario general de la CEM–, es ideal que cada comisión existente en los departamentos respectivos se adapte a ese Plan Global, y no en sentido contrario”.

DEBILIDADES Y FORTALEZAS

En la reunión celebrada en Bogotá se constató que la Misión Continental tiene una gran debilidad: la falta de preparación de agentes laicos que actúen también como misioneros. “Tenemos muchos bautizados, pero no evangelizados, falta formación bíblica y teológica. Les hemos dado solo un ‘a, b, c’, y Aparecida nos dice que hay que darlo todo para formar verdaderos discípulos y verdaderos misioneros, nos falta animar”, reclamó el secretario general del CELAM.

José Leopoldo González, sin embargo, considera que existen también fortalezas que merecen mencionarse. “La Misión Continental forma parte ya de la estructura diocesana, de los planes pastorales de las diócesis”, se felicita. Y añade: “Es un tema que va entrando en el pueblo, incluso en su vocabulario; la mayoría de los agentes de pastoral hablan de Aparecida, del encuentro con Jesucristo, de la misión, de que el bautizado tiene que ser misionero…”. Son fortalezas que se han ido potenciando a través de los distintos departamentos con programas que ayudan a caminar a los episcopados, “porque no olvidemos que el CELAM es un organismo de servicio, que recoge las inquietudes de las conferencias episcopales y trata de prestar ese servicio de la mejor forma posible”.

En el nº 2.747 de Vida Nueva.

INFORMACIÓN RELACIONADA

Compartir