Fundación especializada del episcopado español envía representante para crear soluciones
Llegar hasta la raíz del fenómeno de la migración de colombianos y otros extranjeros hacia Europa y en particular hacia España, movió la imaginación de la Iglesia española a buscar el origen del problema y contribuir a su solución en Colombia.
Así se desprende de la visita que recientemente hiciera un representante de la Asociación Comisión Católica de Migración (ACCEM), organismo que surgió en el seno de la Conferencia Episcopal Española y que hoy como brazo ejecutivo atiende el fenómeno de la migración extranjera y sus efectos sobre quienes han ejercido el derecho a migrar a otro país, producto de las presiones sociales que ocurren en su nación.
El sacerdote español Braulio Carlés Barriopedro estuvo de gira por algunas de las regiones y ciudades colombianas que enfrentan las más diversas situaciones de orden social. El representante de ACCEM pudo observar y conocer en parte cómo se vive ahora mismo en Montería, Medellín, Bogotá y Soacha.
“En España, Colombia es un país querido y organizaciones como las nuestras sí que recibimos también refugiados políticos, desplazados y que también tiene mucho retorno, entonces, teniendo en cuenta todas estas circunstancias, creemos que estratégicamente es un país al que hay que ponerle mucha energía, ayudar y apoyar mucho, sobre todo por el tema del conflicto armado y también por el tema del desarrollo”.
El mismo representante contactó distintas organizaciones pero con causas comunes, el trato de la movilidad humana, la prostitución, el desplazamiento y la delincuencia. “Queremos elaborar proyectos en marcha con FAMIG (Fundación de Atención al Migrante), Movilidad Humana y organizaciones en Soacha, instituciones que trabajan con el conflicto armado, que son conocidas y conocen bien su territorio, pues se van a juntar para elaborar un proyecto común que posteriormente me enviarán a España y con el cual esperamos que las administraciones estatales, como autonómicas o regionales entiendan el proyecto y sean generosas en colaborar para la solución de toda esta situación”, explicó el sacerdote Carlés.
“Queremos trabajar todo el tema de bandas armadas, el tema de pobreza y desarrollo a través de las entidades correspondientes y en particular de la mano con Pastoral Social, en este momento mi papel es como de embajador, de recolector de información para luego ver cómo y desde ACCEM acogen el proyecto en España”.
El interés en marcha obedece a todo un planteamiento de carácter internacional que se ha hecho en la ACCEM y que toca igualmente a países africanos en donde ya se está desplegando una estrategia similar, contribuir a solucionar ciertos fenómenos sociales que padece la población en cada pueblo como forma de prevención a males mayores en otro país. De hecho, uno de los problemas que se han dado durante los últimos tiempos como efectos de la migración, son los reparos o celos que el propio nacional español ha puesto frente al apoyo oficial y de instituciones que como la Iglesia prestan a extranjeros.
“Así como está el derecho a emigrar también está el derecho a no hacerlo, a desarrollarse en su propio país y accediendo a sus derechos en el mismo. Creemos también que si atacamos el problema de raíz, que si vamos hasta el lugar de donde la gente sale, al origen, es la mejor manera de solucionar un conflicto, de solucionar el fenómeno migratorio y que por supuesto también seguimos trabajando igual en España con los que están allí, sean extranjeros o no”. “Así como muchos están bien integrados y trabajando, también son bastantes los que se han quedado sin empleo ante la crisis económica que enfrenta España y que afecta a toda la población en general, de modo que estamos reconduciendo la situación y trabajamos con todo el mundo no solo con el inmigrante”, concluyó el representante de ACCEM. VNC
TEXTO: VNC
FOTOS: ARCHIVO SM
