A pedir de boca

18 comidas

(J. L. Celada) Ni una, ni tres, ni cinco. Hasta 18 son las comidas que prepara Jorge Coira a lo largo de todo un día en Santiago de Compostela. Y la cifra no parece casual, porque el realizador gallego alcanza en este nuevo trabajo la mayoría de edad dentro de la profesión que con El año de la garrapata (2004) no pudo ni supo ganarse. “Si no sabes qué hacer con tu vida, lo mejor es no hacer nada”, predicaba aquella fallida producción sobre los primeros dilemas laborales y las relaciones parasitarias con los progenitores. Sin embargo, todo apunta a que no es el caso de este inquieto cineasta camino de los 40.

Su última creación es una prueba más de que este oficio sigue proporcionando infinitas posibilidades (y no estamos hablando del 3D) a quien esté dispuesto a seguir reinventándose en el noble arte de contar historias. Las que aquí nos narra Coira no tienen nada de particular en sus personajes y situaciones. Se trata de una veintena de individuos sentados en torno a una mesa o frente a la barra de un bar, protagonizando algunos de los momentos más rutinarios de cada jornada: desayunar, comer y cenar, los tres bloques en que a la postre divide su propuesta.

Ahora bien, lo que a priori podría pasar por un menú del día acaba convirtiéndose en un plato a pedir de boca para el mejor paladar cinéfilo, una sorpresa de alta cocina surgida de los fogones de la sala de montaje. Porque ahí reside el gran secreto de estas 18 comidas: 90 horas de material grabado, con el aliño de una improvisación controlada y la feliz participación de un grupo de intérpretes entregados con indudable frescura a su papel, dan como resultado este modesto banquete que abre el apetito y el alma.

Entre risas y lágrimas, en casa o en el restaurante, solos o acompañados, a voces o en silencio (como ese anciano matrimonio, que hace de unos pocos gestos sus mejores palabras, y de los ritmos cotidianos, su ritual más sagrado), los seres que habitan el universo concebido por Coira vuelcan sus sentimientos sobre el mantel sin otra pretensión que compartirlos con sus parejas, hermanos, amigos o antiguos amores. Una receta conocida, pero que sigue proporcionando una atractiva mezcla de sabores: agrios y dulces, como la vida misma.

Carnes o pescados, de elaboración propia o solicitadas a domicilio, pesadas o ligeras, las 18 comidas que el director incluye en su carta no sólo acompañan tres momentos importantes del día, sino que, de algún modo, marcan también la trayectoria vital de la persona: el despertar de la infancia (desayuno), la irrefrenable pasión de la juventud (comida) y la hora de las confidencias sinceras y la toma de decisiones de la edad adulta (cena). Y una única salsa con la que aderezarlo todo mañana, tarde y noche: el incansable anhelo humano de felicidad. Que la disfruten.

FICHA TÉCNICA

TÍTULO ORIGINAL: 18 comidas

DIRECCIÓN: Jorge Coira

GUIÓN: Jorge Coira, Araceli Gonda y Diego Ameixeira

FOTOGRAFÍA: Brand Ferro

MÚSICA: Iván Laxe y Piti Sanz

PRODUCCIÓN: Fernanda del Nido, Farruco Castroman, Luis Tosar y Hugo Castro Fau

INTÉRPRETES: Luis Tosar, Sergio Peris-Mencheta, Cristina Brondo, Víctor Clavijo, Esperanza Pedreño, Pedro Alonso, Juan Carlos Vellido, María Vázquez

En el nº 2.732 de Vida Nueva.

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