El negocio del aborto

Blood money. El valor de una vida

(J. L. Celada) La gran mayoría de personas no sabe lo que es un aborto. Esta sencilla pero trágica constatación en boca de un sacerdote estadounidense (uno de los múltiples testimonios recogidos por Blood money. El valor de una vida) es, quizás, una de las grandes –y más graves– verdades acerca de un tema que ha enfrentado a políticos, científicos, juristas… y mujeres. Únicamente la Iglesia católica se ha mantenido firme y fiel en la defensa de la vida como don de Dios desde su concepción hasta su muerte natural.

Todo ello vuelve a ponerse de manifiesto en el trabajo de David K. Kyle, un documental tan interesante como necesario, al que, sin embargo, conviene hacer algunas puntualizaciones. Formales, por tratarse de un ejercicio cinematográfico; y de contenido, dadas las múltiples perspectivas que intervienen en un asunto de semejante complejidad y calado.

Por lo que atañe a su factura, cabe decir que el interminable rosario de rostros que se sucede ante la cámara, lejos de avivar el ritmo y enriquecer la propuesta, no sólo produce aturdimiento (demasiados datos en poco tiempo), sino que desluce estéticamente la narración y hasta imprime un cierto aire propagandístico a la cinta. Tampoco es un recurso muy actual los planos inserto (ecografías, fetos, instrumental quirúrgico, niños correteando por el campo…) para enfatizar un discurso ya de por sí contundente: millones de vidas que se pierden al año por el aborto (también de madres que se someten a una intervención “segura y legal”). Del apéndice final “a la española”, huelgan comentarios.

Hechas estas salvedades, nadie puede ignorar la escalofriante realidad que irrumpe en la pantalla a golpe de documentadas opiniones y recuerdos dolorosos. Y es aquí donde cobran un valor especial –no sólo dramático– las palabras rotas de todas esas mujeres que sufrieron en sus carnes los riesgos de un aborto y en cuyos rostros y almas aún perduran las huellas de una “libre elección” que no fue tal, o las de la ex propietaria de un clínica donde se practicaron 35.000 abortos (incluido el de su propio hijo). Relatos de una crudeza sólo comparable a su humanidad herida.

No se puede decir lo mismo de otras muchas apariciones de miembros de Operation Rescue/Operation Save America o The Justice Foundation. Sus argumentaciones, aunque ponen al descubierto la industria del aborto y sus terribles consecuencias (entre ellas, el vertiginoso descenso de la población afroamericana en su país), se acercan peligrosamente al precipicio de lo ideológico y/o patriotero, sacando a relucir la esclavitud o cuestionando el sistema público de salud de los demócratas mientras pasan por alto, por ejemplo, que a la guerra de Irak –escenario de otros tantos millones de muertes– fueron conducidos por los republicanos.

Demagogias al margen, vale la pena acercarse a Blood money para desenmascarar el negocio del aborto (lucrativo para unos cuantos y tan ruinoso para todos) y reivindicar sin tapujos El valor de una vida, la única que tenemos.

FICHA TÉCNICA

TÍTULO ORIGINAL: Blood money

GUIÓN Y DIRECCIÓN: David K. Kyle

FOTOGRAFÍA: Jeff Butler

MÚSICA: John Wenger

PRODUCCIÓN: David K. Kyle, John Zipp y Roman Jaquez

En el nº 2.726 de Vida Nueva.

————

INFORMACIÓN RELACIONADA

Compartir