Zapatero retrasa la reforma de la Ley de Libertad Religiosa

Asegura que el Gobierno se centrará en los Presupuestos Generales del Estado y en leyes económicas

El presidente Zapatero, durante la rueda de prensa que ofreció en Shanghái (China)

(Victoria Lara/ Miguel Ángel Malavia) El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, confirmaba este lunes 30 de agosto que en el presente trimestre no se aprobará ninguna ley que no tenga que ver con la economía, por lo que tampoco está en la agenda del Ejecutivo aprobar la reforma de la Ley de Libertad Religiosa.

Zapatero aseguraba durante una rueda de prensa en Shanghái (China), con motivo de su visita oficial al país, que el Gobierno está “concentrado en los presupuestos y leyes económicas”, por lo que considera “lógico” que en este trimestre no se tramite ninguna ley que no tenga que ver con la economía.

El pasado mes de enero, la revista Vida Nueva ya informaba en su número 2.692 de que la reforma de la Ley había dejado de ser prioritaria para el Gobierno, e incluso adelantaba que “no pocos dirigentes socialistas verían con muy buenos ojos que el tema se dejase para después de las elecciones municipales y autonómicas de 2011, aunque coincida con la Jornada Mundial de la Juventud en Madrid”.

El propio director general de Relaciones con la Confesiones, José María Contreras, admitía en una entrevista concedida al semanario en abril (VN nº 2.702) que desconocía la fecha de presentación de la reforma: “Nosotros trabajamos para tener ese borrador. El calendario ya no lo fijamos nosotros”, apuntaba Contreras.

Tampoco debería desdeñarse el que no pudiera aprobarse la ley ni siquiera en la parte final de la legislatura. La dificultad con la que se está encontrando el Gobierno a la hora de encontrar consensos en las Cortes –la aprobación de los Presupuestos parece pendiente, casi en exclusiva, de alcanzar un acuerdo final con el PNV–, unida al descontento de un sector muy grande de la sociedad afectado directamente por la crisis –quedan pendientes más recortes sociales–, podría llevar al presidente Zapatero a dar marcha atrás en lo que se prometía como uno de sus proyectos “estrella” al inicio de la legislatura.

En el nº 2.719 de Vida Nueva.

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