Campeones

(Lucía Ramón Carbonell– Profesora de la Cátedra de las Tres Religiones de la Universidad de Valencia)

“La campaña promovida por los Comités de Solidaridad África Negra (UMOYA), la Red de Entidades de Desarrollo Solidario y otras entidades para impedir la reunión de Zapatero con Paul Kagame, presidente de Ruanda, ha logrado desactivarla”

En un mes repleto de triunfos deportivos es fácil que quede inadvertido el mejor triunfo del pueblo español. No se trata de fútbol, motos, tenis o ciclismo, sino de una actividad que requiere incluso mayor tenacidad, fortaleza y espíritu de sacrificio que los de nuestros deportistas. La del ejercicio de una ciudadanía responsable y solidaria que pone límites morales a sus políticos. Bravo. La campaña promovida por los Comités de Solidaridad África Negra (UMOYA), la Red de Entidades de Desarrollo Solidario y otras entidades para impedir la reunión de Zapatero con Paul Kagame, presidente de Ruanda, ha logrado desactivarla. Ban Ki-moon ha designado a ambos para presidir la comisión preparatoria de la cumbre de los Objetivos del Milenio. Es un escándalo. En 2008, la Audiencia Nacional emitió órdenes de arresto para 40 altos mandos de la cúpula militar ruandesa por genocidio y crímenes contra la humanidad. Kagame ha liderado con mano de hierro un conflicto armado que ha costado la vida de dos millones de ruandeses y cinco de congoleños. Además, mandó asesinar a nueve cooperantes y misioneros españoles, testigos incómodos de sus masacres. Las ONGD también han pedido al presidente español que escuche a los familiares de los españoles asesinados, colabore con la justicia y solicite a la ONU que presione al Gobierno ruandés para que cese en su sistemática violación de los derechos humanos.

En agosto se celebran elecciones, y ningún opositor ha sido autorizado a presentar su candidatura. Presos, asesinados o en el exilio poco pueden hacer por su pueblo. Por eso han agradecido el gesto del pueblo español como una señal de esperanza. El partido contra la impunidad no ha hecho más que empezar. Ahí te quiero ver, furia española.

En el nº 2.718 de Vida Nueva.

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