PSOE y PP se unen para solicitar su pertenencia a una diócesis extremeña
(F. J. Pérez Valero– Mérida) La Santa Sede está “sustanciando” la posible incorporación del Monasterio de Guadalupe y de otros 31 municipios, que ahora pertenecen a la Archidiócesis de Toledo, a la Provincia Eclesiástica Extremeña. Ésta fue la respuesta ofrecida por el Arzobispado de Mérida-Badajoz tras la aprobación, la pasada semana en el Parlamento regional, de una declaración institucional por medio de la cual se “insta a la Iglesia a que haga caso de las voces que, desde hace años, vienen reclamando que Guadalupe pase a formar parte de la Provincia Eclesiástica Extremeña”.
PSOE y PP, los dos grupos con presencia en la Cámara, aprobaron un texto en el que se mostraba, “desde el más profundo respeto a la independencia y autonomía de la Iglesia católica para gestionar sus propios asuntos e intereses, su expreso apoyo a que Guadalupe dependa de una jurisdicción eclesiástica con sede en el territorio extremeño”. Y se señala la necesidad de su aprobación “por la devoción de muchos, el fervor de otros y, siempre, y sobre todo, por ser considerado como símbolo identitario que nos refuerza y nos une como pueblo”.
Desde el Arzobispado de Mérida-Badajoz indicaron que “la comisión correspondiente de Roma ya se está encargando de este asunto desde hace algún tiempo, si bien no se puede avanzar con exactitud cuándo tomará una decisión definitiva acerca del mismo”. Y el obispo de Plasencia, Amadeo Rodríguez Magro, afirmó por su parte, que los obispos extremeños “no han dejado jamás de activar el expediente sobre Guadalupe tanto ante el Arzobispo de Toledo como en los organismos romanos”. En un comunicado de prensa, Rodríguez Magro expresó su agradecimiento por el “tono respetuoso del texto [de la Asamblea], tanto por el reconocimiento de la autonomía e independencia de la Iglesia católica en este asunto, como por la valoración que hace del hecho religioso católico”.
Un hito
El asunto “Guadalupe” lleva décadas encima de la mesa de la Iglesia extremeña. En los últimos meses, una asociación ciudadana denominada Guadalupex ha vuelto a poner de actualidad el viejo debate. El portavoz de esta entidad, Julián Barriga, sostiene que el Arzobispado de Toledo será “sensible” a la “legítima aspiración de todos los extremeños”. Desde Guadalupex afirman que “el hito conseguido en la Asamblea de Extremadura ya no tiene reversión posible y a partir de ahora, lo que hay que hacer es acelerar los tiempos para conseguirlo”.
En el nº 2.697 de Vida Nueva.
