El comunicador ha de asumir un compromiso con la verdad

Analizan en Salamanca los retos de las facultades católicas de comunicación

celli-firma-libro-honor-ups(Victoria Lara) Las facultades de comunicación católicas han de valorar la capacidad narrativa, “ayudando a las generaciones jóvenes a redescubrir la gran capacidad de impacto sociocultural que tienen esas narraciones”, además de “dar testimonio de que nada de lo humano les es ajeno” y de transmitir a los jóvenes que en la finalidad de la comunicación humana “deberá haber un compromiso serio con el tema de la verdad”. Estas palabras del presidente del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales, Claudio Maria Celli, durante el discurso inaugural del I Congreso de Facultades Católicas de Comunicación, que se celebró en Salamanca durante los días 22 y 23 de mayo, podrían resumir los principales retos a los que se enfrentan hoy estos centros de formación.

A lo citado, Celli añadió la necesidad de que las facultades ofrezcan a los alumnos “unas sólidas bases antropológicas, de modo que la ética emerja naturalmente de una visión del hombre en su integridad” y que este planteamiento antropológico “garantice el paso de un culto de la técnica mediática a una madura espiritualidad de la comunicación”. Concluyó su ponencia con el deseo de que “se hagan todos los esfuerzos para mantener una actitud responsable y abierta hacia las novedades de un contexto socio cultural como el de hoy, aún en parte inexplorado”.

Este primer congreso, con el título de Una oferta para el diálogo cultural, ha estado organizado por la Facultad de Comunicación de la UPSA y la Comisión de Medios de la CEE. La decana de Comunicación de la UPSA, Ana Lucía Echeverri, hace un balance “muy positivo” del encuentro, en el que participaron ocho de las diez universidades católicas que hay en España: la Universidad de Navarra, Cardenal Herrera CEU Valencia, CEU San Pablo Madrid, Abat Oliba CEU de Barcelona, Ramón Llull, San Antonio de Murcia, Francisco de Vitoria y la UPSA. “El contenido de las ponencias fue de una gran calidad académica y científica y se tocaron los vectores más importantes, como son la formación del alumno, la formación y selección del profesorado, la figura del tutor, y especialmente se hizo referencia a cuál tiene que ser la misión de las facultades de comunicación de las universidades católicas”, dice Echeverri.

El congreso contó con otras ponencias, como la del presidente del Instituto de Antropología y Ética de la Universidad de Navarra, Alejandro Llano. Además, se celebraron dos mesa redondas: una sobre La formación ética del comunicador hoy y otra sobre Vocación docente en una universidad en cambio.

En el nº 2.662 de Vida Nueva.

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