Derrotas con trofeo

Cosas insignificantes

cosas-insignificantes(J. L. Celada) Llama la atención que Guillermo del Toro, tan proclive a los excesos oníricos y las atmósferas inquietantes (El espinazo del diablo o El laberinto del fauno), se preste a producir un trabajo como Cosas insignificantes, un modesto drama coral de corte intimista que encuentra en lo cotidiano su mejor fuente de inspiración. Porque lo que aquí cuenta es lo que se tiene más a mano (padres, hijos, parejas…) o lo que se perdió (a modo de recuerdos, de heridas por cicatrizar…), en ningún caso lo que puede llegar a suceder (sueños).

cosas-insignificantes-2Cobra más valor, por tanto, el impulso del realizador mexicano a un proyecto que durante ocho largos años fue sólo eso. Gracias a su apoyo, la debutante Andrea Martínez Crowther -de origen canadiense, aunque compatriota de adopción- ha podido sacar adelante con interesante resultado una cinta más cercana a títulos de sobra conocidos de otros compañeros de profesión que a las creaciones de su mentor.

Con las Vidas cruzadas de Altman como inevitable referente, la directora arma un puzzle humano a medio camino entre los Amores perros de González Iñárritu y las Historias mínimas de Carlos Sorín, en torno a una caja que guarda esas Cosas insignificantes que dan título a su obra. Pero tales objetos (una pequeña nota con un teléfono, un caballito de mar de papel, un regalo en forma de flecha…), lejos de representar una conquista, un triunfo, para la nueva propietaria de tan curiosos tesoros, son trofeos que nos remiten casi siempre a las derrotas de sus dueños. 

cosas-insignificantes-3En un México DF de fuertes contrastes (lujosas mansiones y cuartuchos oscuros, interminables atascos y soledades que claman al cielo…), asistimos a los encuentros y desencuentros de un puñado de personajes lastrados por la incomunicación, la culpa o el miedo. Individuos que coleccionan fracasos, desengaños, arrepentimientos…, emociones. Todo ello encarnado en alguno de esos enseres que alberga el pequeño baúl de la protagonista, el mismo que para ella, sin embargo, se convierte en válvula de escape de tantas dosis de realidad.

Dado que su estructura narrativa está en vías de erigirse -si no lo ha hecho ya- en un género con sello propio, no parece que sea la novedad la gran baza de estas Cosas insignificantes. Tampoco lo es su solidez argumental; menos aún su ritmo irregular. Ahora bien, su reparto otorga un toque de distinción y oficio a un filme que, aunque a ratos y entre líneas, nos pone en la pista de una cineasta llamada a codearse con los Del Toro y compañía. ¡Ay si toda ópera prima alcanzara siquiera el nivel de ésta!

FICHA TÉCNICA

TÍTULO ORIGINAL: Cosas insignificantes

GUIÓN Y DIRECCIÓN: Andrea Martínez Crowther

FOTOGRAFÍA: Josep Maria Civit

MÚSICA: Leonardo Heiblum y Jacobo Lieberman

PRODUCCIÓN: Bertha Navarro, Luis de Val y Guillermo del Toro

INTÉRPRETES: Bárbara Mori, Fernando Luján, Carmelo Gómez, Lucía Jiménez, Paulina Gaitán, Arturo Ríos

En el nº 2.661 de Vida Nueva.

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