La divergencia de posturas marca los días previos a la Semana Santa
(Miguel Ángel Malavia) Cuando la pasada semana la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba propuso apoyar la campaña de la CEE contra el aborto portando lazos blancos en palios y cruces en las procesiones de Semana Santa, pocos podían imaginar el alud de reacciones encontradas que produciría la iniciativa. En primer lugar, desde el ámbito político. La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, opinó que “no se debe mezclar la política con la religión”. Más allá fue Diego Valderas, coordinador de IU en Andalucía, quien tachó la campaña de “guerra santa” contra el aborto. Un tono diferente empleó Rosa Aguilar, alcaldesa de Córdoba por IU, quien convocará una reunión con los cofrades. Al apostar por “el diálogo y respeto”, pidió que la Semana Santa sea “espacio de encuentro y no de desencuentro ni polémica”.
Desde el punto de vista episcopal, el cardenal de Sevilla, Carlos Amigo, mostró su “agrado” y alabó la “postura de coherencia” de las cofradías, pues “como asociaciones cristianas que son, no pueden sino tener una respuesta en este sentido”. Juan José Asenjo, su coadjutor, aclaró que “las cofradías no están politizando este tema; en todo caso, serán otras instancias quienes politizan”. A su juicio, “no van contra nada ni nadie”, siendo su iniciativa “un sí a la vida en todas sus fases”, “absolutamente coherente” con su condición de católicos.
Con el paso de los días, la polémica y la división se han extendido también a las cofradías, manifestándose en uno u otro sentido según las diócesis, aunque la mayoría ha decidido dejar a un lado la iniciativa de los lazos. De hecho, parece que sólo se mantendrá en Córdoba, donde surgió. Desde Vigo, responsables de hermandades insistieron en que no se debía “politizar” la celebración. En declaraciones al Faro de Vigo, Ángel Dorrego, coordinador de las celebraciones en la ciudad, afirmó que “no podemos confundir la Semana Santa con algo oficial de la Iglesia; hay que separar este tipo de cosas si no queremos cargárnosla”. El presidente de la Junta de Cofradías de Zamora, Pedro Julián Hernández, calificó la iniciativa de “un tanto absurda”. Otras asociaciones de cofrades, como las de Málaga, Valladolid o Granada, se han postulado a favor de la vida y en contra del aborto, aunque sin mencionar posibles gestos externos en las procesiones. En Málaga, el comunicado matizaba que la defensa de la vida no era incompatible con “entender la situación de aquellas personas que pueden llegar a plantearse esta opción [por el aborto] como una alternativa, sin llegar nunca, por supuesto, a compartirla ni a estar de acuerdo con ella”. En Sevilla se ha optado por desarrollar respectivos ciclos de “formación e información” sobre la importancia de la vida “después de Semana Santa”.
En el nº 2.654 de Vida Nueva.
