Son de calle

El truco del manco

(J. L. Celada) En 1998, mientras Fernando León de Aranoa nos mostraba cómo un chaval de su Barrio se las ingeniaba para llevar algo de dinero a casa repartiendo pizzas ¡sin moto!, otro muchacho de apenas 20 años -eso sí, sin la coartada de la ficción- ya conocía el mismo oficio. Pero hoy, cumplidos los 31, el buscafortunas de entonces se estrena en la dirección de largometrajes con una producción que toma el testigo del también creador de Los lunes al sol como nadie lo había hecho en la última década.

Feliz coincidencia o mera anécdota, lo cierto es que veterano y debutante comparten mucho más que ese curioso detalle. El truco del manco, opera prima de Santiago A. Zannou, derrocha tanta verdad que recupera a lo grande aquel cine a pie de calle, cuyo descarnado realismo no concede ni un respiro. La vida en estado puro, tampoco. Menos aún la que diariamente se abre paso a zarpazos en la periferia de cualquier metrópoli actual.

De todo ello están muy al corriente los personajes que, con sus fatigas y trapicheos, entretejen la historia que ahora se nos narra, especialmente su protagonista. En un papel escrito casi a la medida de su propia biografía, Juan Manuel Montilla ‘El Langui’, vocalista del grupo de hip hop La Excepción, se amarra hasta el final a su inquebrantable voluntad y a un espíritu de superación capaces de sobreponerse a toda suerte de barreras (arquitectónicas, familiares y sociales) en la conquista de un sueño que anime la gris y anodina melodía del ambiente.

Porque los escenarios son la otra gran baza de esta cinta. Nuestro particular héroe de extrarradio no sería el mismo sin esas deprimentes -aunque impecables- localizaciones de una ciudad mestiza que el mulato Zannou recrea con pulso firme. Su mirada desprende tal aroma de honestidad que en su retrato no caben paternalismos ni medias tintas. Pero no sólo sus imágenes huelen a asfalto, sino también su lenguaje y la banda sonora que acompaña a este grupo de perdedores en su empeño por asomar la cabeza desde la alcantarilla de las miserias cotidianas.

La trastienda de un mundo que da la espalda a las diferencias (raciales, religiosas y, sobre todo, económicas) irrumpe aquí a golpe de jeringuilla, de botella, de empleos ilegales, de violencia física y verbal. Y lo hace sin recurrir al tremendismo, mucho menos a la condescendencia o al juicio gratuito. Su director conoce cada palmo del terreno que pisa, ha pasado la infancia escuchando los lamentos que brotan por sus esquinas, y sabe que basta con poner una cámara delante para atrapar toda la fuerza de este universo urbano.

Zannou lo ha hecho con maestría, hasta el punto de que El truco del manco se erige por derecho en digna representante (y sucesora) de un género tentador, aunque perdido a menudo entre el tópico y el síndrome reporteril de ‘Callejeros’. No es el caso.

FICHA TÉCNICA

TÍTULO ORIGINAL: El truco del manco

DIRECCIÓN: Santiago A. Zannou

GUIÓN: Santiago A. Zannou e Iván Morales

FOTOGRAFÍA: Albert Pascual

MÚSICA: Woulfrank Zannou

PRODUCCIÓN: Inés Font

INTÉRPRETES: Juan Manuel Montilla ‘El Langui’, Ovono Candela, Javier Iglesias ‘Gordo’, Elio Toffana, Mala Rodríguez, Juan Navarro, Diego Carrasco, Joaquín Mbomio, Fanny Gatibelza

En el nº 2.646 de Vida Nueva.

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