La amenaza del olvido

La ola

(J. L. Celada) Harta de cargar con la culpa de sus mayores, la juventud alemana no parece dispuesta a seguir recordando el nazismo. Como mucho, asume la responsabilidad histórica que le corresponde a su país por aquellos años oscuros. Aunque no todos, porque los nietos del Tercer Reich conviven actualmente con los hijos de la inmigración. ¿Olvido?, ¿distanciamiento?… Hay otra pregunta, la que da pie a La ola, y cuya respuesta desaconsejaría tales actitudes: ¿es posible una dictadura hoy en Alemania? 

No es ésta otra producción acerca de los desmanes del régimen de Hitler; sí sobre la amenaza de una herencia que en no pocos rincones de Europa ha adquirido la categoría de partido político. Una conquista que, por más que nos pese, es obra de la democracia, un sistema imperfecto, pero el único que permite también, por ejemplo, la libertad de cátedra, esa arma de doble filo capaz de educar conciencias y manipular voluntades con discursos prácticamente idénticos.

Y de ello da buena cuenta Dennis Gansel en su inquietante experimento pedagógico, una cinta que recoge las vivencias de un profesor estadounidense en la década de los 60, y que el joven realizador germano traslada a un instituto de su tierra. Allí, en un seminario organizado para conocer y debatir los postulados de la autocracia, un nutrido grupo de alumnos acaba siendo víctima de una práctica que empezó casi como un juego.

A medida que transcurre la semana, la disciplina y el sentido de comunidad que el docente va inculcando en su clase irán adquiriendo rasgos de un gobierno totalitario: un uniforme, un nombre, un logo, un saludo… Así, lo que a priori se antojaban como valores necesarios para consolidar la fuerza de su unidad, se convertirán en germen de exclusión y de violencia contra quienes no aceptan tales reglas, traspasando definitivamente los límites del laboratorio del aula (y de la propia convivencia social).

Más concluyente en su espíritu de denuncia que en su tono didáctico, no por ello La ola pierde un ápice de su fuerza y cercanía. En un tiempo de incertidumbre laboral, injusticias globales y familias rotas, la soledad e insatisfacción de tantos jóvenes es un imprevisible caldo de cultivo donde pueden llegar a gestarse ideologías y posicionamientos extremos. Que los adultos perdamos de vista ese peligro real puede resultar tan grave como el hecho de que abusemos de nuestra autoridad de padres, tutores, maestros… A la postre, ambos caminos conducen al mismo descontrol, ese caos que deja a su paso cualquier tsunami emocional a ciertas edades, cuando las inquietudes, el desencanto y la rebeldía se mezclan con demasiada facilidad. Con el agravante de que se trata de un fenómeno colectivo, por lo que conviene no desdeñar su potencialidad. Tampoco la de esta interesantísima película, como útil herramienta para la escuela y refrescante advertencia para el futuro.

FICHA TÉCNICA

TÍTULO ORIGINAL: Die welle

DIRECCIÓN: Dennis Gansel

GUIÓN: Dennis Gansel y Peter Thorwarth, sobre el relato de William Ron Jones

FOTOGRAFÍA: Torsten Breuer

MÚSICA: Heiko Maile

PRODUCCIÓN: Christian Becker 

INTÉRPRETES: Jürgen Vogel, Frederick Lau, Max Riemelt, Jennifer Ulrich, Christiane Paul

En el nº 2.640 de Vida Nueva.

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