(Maite López Martínez) El Adviento llega, una vez más, invitándonos a ser estrenado como si nunca antes lo hubiéramos vivido. Algunas canciones populares sonarán una y otra vez en celebraciones eucarísticas y vigilias durante las próximas semanas, amenazando con aburrirnos a mitad de camino. Curiosamente, y aunque tanto la Palabra de Dios como la liturgia invitan insistentemente a abrirnos a lo nuevo, cuesta mucho escuchar en nuestras asambleas y comunidades algo distinto al típico repertorio.
Hay muchas razones en las que uno se puede excusar para cantar lo de siempre, pero la verdad es que no será porque falten autores, temas y motivos para renovarse. Como, por ejemplo, una pequeña joya que acaba de salir a la luz y que no puede pasar desapercibida: Navidad actual. Se trata de canciones de Adviento y Navidad compuestas e interpretadas por Borja Iturbe y María Barcea que, con una amplia y rica trayectoria educativo-pastoral, y acompañados por varios músicos, han iniciado su andadura en el mundo discográfico como grupo CoMpaSIóN. Han sabido combinar sencillez y maestría musical con un contenido denso y cuidado a través de letras que rozan, y en algunos casos lo logran, el lenguaje poético. La extraordinaria calidad espiritual y musical del disco hace difícil, incluso, elegir las canciones favoritas, que casi siempre se encuentran a simple vista. Para entrar de puntillas en el misterio de un diálogo que cambió el curso de la humanidad, Anunciada; para saborear la Navidad al tiempo que la preparamos, Quién lo viera; para preñarnos de la alegría y la esperanza de María, Llena de gracia; para compartir ilusiones y compromisos, Preparándote el camino; para entender el sentido verdadero del Adviento, Esperarte… Y el resto de los temas para saborear por dentro y por fuera la Buena Noticia del Dios hecho niño.
En el nº 2.638 de Vida Nueva.
