Madrid acogerá la próxima Jornada Mundial de la Juventud en 2011

El rumor se confirma en la Misa de clausura del encuentro de Sydney

(Antonio Pelayo– Enviado especial a Sydney) Era exactamente la una menos cuarto del domingo 20 de julio (las cinco menos cuarto de la madrugada en España) cuando Benedicto XVI, con una sonrisa casi cómplice, pronunciaba la frase ritual: “La Jornada Mundial de la Juventud 2011 tendrá lugar en Madrid, España. Hasta ese momento, recemos unos por otros y demos a todo el mundo nuestro gozoso testimonio de Cristo. Dios os bendiga a todos”.

Instantes después, un airoso grupo de muchachas y muchachos españoles, oportunamente situados al pie del altar papal, prorrumpió en aplausos y gritos, y agitó al viento numerosas banderas de color rojo y gualda mientras gritaba: “¡Sí, sí, sí, Benedicto a Madrid!”.

En el inmenso terreno oval del Hipódromo de Randwick, donde se habían concentrado para la Misa de clausura unas 350.000 personas, varios millares de españoles hicieron coro y jalearon la noticia (que en realidad era un secreto a voces), mientras  recibían las sinceras felicitaciones de peregrinos de diversos países, especialmente latinoamericanos y europeos.

En ese mismo momento, el cardenal Antonio María Rouco Varela, arzobispo de Madrid, se acercó al Santo Padre para agradecerle la elección de la capital española como sede de la 24ª Jornada Mundial de la Juventud, la segunda que se celebrará en nuestro país. La primera tuvo lugar en Santiago de Compostela del 19 al 20 de agosto de 1989, siendo ya arzobispo de la ciudad del Apóstol monseñor Rouco.

A la seis de la tarde, en el Hotel Radisson -donde han residido los obispos italianos y españoles durante  su estancia en Sydney-, el cardenal Rouco abrió su conferencia de prensa con palabras de reconocimiento al Papa por haber acogido favorablemente la candidatura de Madrid. “Se lo agradecemos en el alma”, dijo el arzobispo. Algunas de las preguntas de los informadores se centraron en las consecuencias que podría tener para las relaciones Iglesia-Estado la celebración de la Jornada en España y una segunda visita del Papa a nuestro país. “Hasta ahora -dijo Rouco-, sólo hemos mantenido contactos informales con el Gobierno a este respecto, puesto que la noticia no era oficial. Del Gobierno esperamos libertad de acción y cooperación, como también nosotros se la ofrecemos. Debo decir que esperamos igualmente que la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid nos presten todo su apoyo, ya que, creo, rozaremos la cifra de dos millones de peregrinos, y eso exige una acción muy concertada. Pero no olvidemos tampoco que los acontecimientos de Iglesia son, fundamentalmente, de Iglesia”.

Ante la insistencia de algún colega, el cardenal confirmó que esperaba reunirse pronto con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. “Es posible -precisó- que la entrevista se produzca antes de finales del mes de julio“.

En cuanto a las razones que han movido a la Santa Sede a aceptar Madrid como sede de la Jornada Mundial, el cardenal dijo: “No me toca a mí hablar en nombre de Roma, pero creo que la situación geoestratégica de nuestra Iglesia y su vocación misionera hayan sido factores a favor. Mantenemos unas relaciones muy familiares con las Iglesias de Latinoamérica, de Estados Unidos y también con las europeas, sin olvidar las de África que nos están muy próximas”. El acto de clausura fue el momento cumbre de la JMJ, tal y como nos ha contado en su crónica -que será ampliada en el próximo número de Vida Nueva– Antonio Pelayo.

Invocar al Espíritu

Otro de los grandes instantes del encuentro, que se ha celebrado en Sydney (Australia) desde el 15 hasta el 20 de julio, tuvo lugar un día antes, el sábado, durante la vigilia que se desarrolló en el hipódromo de Randwick. Benedicto XVI invitó a los asistentes a abrirse “a la fuerza del amor de Dios” para transformar el mundo, en un acto lleno de testimonios, música y oración que duró más de dos horas .

En su discurso, basado en el lema de la JMJ: “Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo y seréis mis testigos”, el Papa instó a los jóvenes a invocar al Espíritu. “Dejad que sus dones os moldeen”, dijo Benedicto XVI, “madurad vuestra fe a través de vuestros estudios, el trabajo, el deporte, la música, el arte. Sostenedla mediante la oración y alimentadla con los sacramentos, para ser así fuente de inspiración y de ayuda para cuantos os rodean”.

En el Rocío, uno de los lugares de España donde se ha vivido paralelamente la Jornada Mundial de la Juventud, se concentraron el sábado más de 5.000 personas de las diócesis andaluzas -según la organización- para participar en una vigilia de oración. Los jóvenes siguieron en directo la homilía del Papa y el momento en el que éste anunció que Madrid sería la próxima sede de la JMJ. Santiago de Compostela, Javier (Navarra) y Madrid, han sido lugares de celebración de otros encuentros de jóvenes simultáneos al de Sydney.

Más información en el nº 2.623 de Vida Nueva.

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