Los bolivianos de Santa Cruz quieren un estatuto de autonomía

Así lo decidió un referéndum que, según el presidente Evo Morales, hace peligrar la unidad del país

(Ronald Grebe– La Paz) La victoria del ‘sí’ al estatuto autonómico en el departamento boliviano de Santa Cruz fue contundente, ya que el 86% de los votantes aprobó el documento marcando el ‘sí’ en la papeleta, mientras que el 14% votó por el ‘no’.

El estatuto aprobado el día 4 dará luz verde a Santa Cruz para definir su política de tierras, economía, educación, ­salud, y le permite crear una Asamblea Legislativa que aprobará leyes departamentales y designará autoridades locales. Además, este documento convierte al actual prefecto en gobernador, y dispone su elección por voto directo. Los miembros de la Asamblea Legislativa también deberán ser elegidos en el departamento.

Los líderes de Santa Cruz decidieron convocar al referéndum sobre el estatuto autonómico después de que el Gobierno de Evo Morales aprobara su proyecto de Constitución sin la presencia de la oposición y cercado con militares en un cuartel de la ciudad de Sucre y con sectores sociales en Oruro.

En estos últimos meses, Evo Morales y el vicepresidente, Álvaro García Linera, realizaron una intensa campaña para desacreditar el referéndum de autonomía –que involucra a los departamentos de Santa Cruz y próximamente a Tarija, Pando y Beni, a los cuales podrían sumarse después Chuquisaca y Cochabamba–, planteando el proceso como una traición a la patria y asegurando que el objetivo final es la división de Bolivia.

El prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, manifestó que “hoy iniciamos el camino hacia una nueva República, un Estado moderno, y debemos lograr un gran acuerdo nacional que armonice las normas bolivianas y fortalezca las instituciones de la República para dar certidumbre y seguridad jurídica a los bolivianos”.

La declaración de Costas se produjo antes de que Morales calificara de “rotundo fracaso” el referéndum y convocara a los prefectos del país a trabajar sobre una autonomía “basada en la nueva Constitución”, refiriéndose al texto constitucional que el oficialismo aprobó en noviembre de 2007 y que es rechazado por los líderes cívicos y de la oposición.

Diferentes analistas del país consideraron que los resultados del referéndum autonómico representan una derrota política del Gobierno de Morales. El especialista en descentralización Carlos Hugo Molina sostuvo que “el resultado del referéndum mostró que no hubo ruptura del orden constitucional, de la unidad del país o el inicio de la separación”.

Concertar, no imponer

El analista Jorge Lazarte manifestó, mientras tanto, que la principal lección de este referéndum es que las dos partes se necesitan y están obligadas a ponerse de acuerdo: a no imponer, sino a concertar. Guido Riveros, por su parte, afirmó que la autonomía hay que verla también como una de las grandes reivindicaciones que han surgido en los últimos 25 años y, más bien, lograr a través del diálogo, de la concertación, las dos grandes reivindicaciones que preocupan hoy a los bolivianos: la autonomía y la lucha contra la exclusión. No puede haber autonomía sin lucha contra la exclusión.

El prefecto de Tarija, Mario Cossío, afirmó que el domingo día 4 las autonomías departamentales comenzaron a consolidarse en Bolivia, al considerar que empieza a construirse una nueva historia en el país, donde las regiones serán las protagonistas.

El cardenal Julio Terrazas, arzobispo de Santa Cruz, que votó en el colegio de La Santa Cruz, pidió mirar estas señales con sabiduría ­para “construir” el futuro del país en un clima de paz y donde no existan atisbos de odio.

“Los obispos reafirmamos nuestra disponibilidad para seguir con el servicio de facilitación en bien del país, y apelamos a las partes involucradas en este proceso para que prime una voluntad clara de diálogo, manifestada con declaraciones, actitudes y hechos coherentes con este objetivo y sin condicionamientos”, enfatizó el secretario general de la Conferencia Episcopal Boliviana, Jesús Juárez.

Aunque hubo algunos avances en el último mes y medio, el obispo Juárez lamentó que “no hay condiciones para iniciar el diálogo”, por tres razones: persiste la desconfianza; se mantienen las declaraciones y acciones de hecho; y no hay definición sobre los interlocutores válidos de ambos sectores ni sobre las entidades facilitadoras de la concertación.

Durante la jornada del referéndum, en las iglesias de Santa Cruz se extendieron grandes carteles con el frase de Jesús “La paz esté con ustedes”, un deseo que el cardenal Terrazas confía en que sea “tomado en serio por los gobernantes y las autoridades departamentales”.

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