José Beltrán, director de Vida Nueva
Director de Vida Nueva

La capacidad del Papa para traspasar la pantalla


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MIÉRCOLES 30. Me sigue sorprendiendo la capacidad del Papa para traspasar la pantalla. Para interpelar, para hablar de tú a tú desde la plaza de San Pedro, aún cuando puede haber miles de kilómetros de por medio: “Hoy os pregunto: ¿tengo en el corazón el viento de la felicidad?”.

SÁBADO 2. Vuelta al cole con una ‘welcome party’ que aplaque ese síndrome postvacacional que se diagnostica con la misma facilidad con la que se recetan paracetamoles para curar todos los males. Nosotros lo sustituimos por gazpacho. Susana y Cristina nos cuentan que se fueron de crucero, con capellán incluido. Sorprendidas del servicio. Y de la acogida, tanto de los turistas como de los trabajadores del barco. Dos misas al día. Y llenas. Pastoral del mar.

DOMINGO 3. Escapada a Arganda del Rey. Concierto de Siempre Así. Entre la multitud, un sacerdote. Me alegra que comparta la fiesta, más allá de los actos propios de la patrona. Desde el escenario le corresponden sin buscarlo y el grupo sevillano concluye su actuación rezando la salve rociera. Y toda la plaza, a media noche, sobre el albero, en oración. Piedad popular sin aspavientos. La fe de un pueblo.

LUNES 4. Las vergüenzas se destapan cuando uno menos se lo espera. Por ejemplo, al retirar un mueble y descubrir en la pared el paso del tiempo. Opciones: volver a tapar o ponerse a trabajar en una reforma, en una conversión. Si se decide simplemente remozar, las grietas acabarán haciéndose notar antes o después. Y quizá con más fuerza. Allá tú. Allá yo.

MARTES 5. “He descubierto que mi lugar es entre el pueblo”. Experiencia misionera de verano de Elisabeth. En India. Palpando el hostigamiento del Gobierno a los cristianos. Pero, sobre todo, la riqueza de una tierra pobre. “Siempre creí en la lengua como la mejor vía para el anuncio del Evangelio. Me equivocaba”.

MIÉRCOLES 6. Reencuentro en la apertura del curso de Comillas. Bert Daelemans. Me cuenta que ha pasado el año en Alaska. Un chispazo me lleva a ‘The young Pope’, al castigo que impone el poliédrico Jude Law. Pero el caso de Bert no es el de un exilio impuesto. “Volvería de nuevo”. Un retiro necesario. Y de encuentro. Con la naturaleza. Con los indígenas esquimales. Con el silencio. No vuelve frío.