Fernando Vidal, sociólogo, bloguero A su imagen
Director de la Cátedra Amoris Laetitia

El cuidado de la cultura, por Makoto Fujimura


Compartir

En 2017, Makoto Fujimura publicó el libro ‘El cuidado de la cultura’ (InterVarsity Press, IVP Books), donde plantea el centro de su propuesta sobre el papel de la belleza en nuestra sociedad.

Fujimura parte del estado de guerra cultural en que se halla nuestro mundo. El término ‘guerra cultural’ fue difundido por el sociólogo James Davison Hunter (1991), líder del Instituto para Estudios Avanzados en Cultura, de la Universidad de Virginia. Frente a las Guerras Culturales, Makoto Fujimura contrapone el Cuidado de la Cultura –’Culture Care’, idea acuñada por su amigo el editor Caleb Seeling.

“La cultura que prevalece está herida y es disfuncional” (Fujimura, 2017: p.45). Hoy en día el arte y la belleza están en declive. Incluso la palabra belleza es tabú: se le da el significado de cultura hegemónica o se ve como algo cosmético y superficial.

Si la cultura fuera un río, estaría contaminado

Fujimura usa la metáfora del río y la tierra. Nuestro ecosistema cultural está contaminado por la polución de la fealdad, dominado por intereses comerciales. Si la cultura fuera un río, estaría lleno de contaminación. “Muchas de las corrientes que alimentan el río de la cultura están contaminadas y, de esa manera, el suelo que debería hidratar está seco y fragmentado… Las artes y otras iniciativas culturales son los ríos que hidratan el suelo de la cultura” y “nuestra cultura actual no da vida… El primer signo de un ecosistema angustiado es la carencia de diversidad” (Fujimura, 2017: p.30).

Esa contaminación del río del arte es efecto de la Revolución industrial, que provocó un extremo reduccionismo por la hiperespecialización y la cultura de los expertos. Por eso, “la fragmentación y el reduccionismo son los principales contaminantes en el río de la cultura” (Fujimura, 2017: p.34). “La realidad de la belleza puede ayudarnos a integrar en medio de tal fragmentación” (Fujimura, 2017: p.28).

Libro el cuidado de la cultura de Makoto Fujimura

Pero el capitalismo ha pervertido la misión del arte, convirtiéndola en decoración u objeto de especulación. Por otra parte, los poderes usan las artes para su propaganda y fomentar el aislamiento y la división. “Demasiados de nosotros vivimos aislados dentro de las tribus de nuestras propias islas culturales… Poca gente es capaz o tiene la voluntad de construir puentes” (Fujimura, 2017: p.39).

“Nuestras almas están hambrientas de belleza”.

En consecuencia, las artes están manipuladas para que sirvan al comercio o a las batallas ideológicas. “Los artistas han sido empujados a los márgenes” (Fujimura, 2017: p.44). En ese contexto de división y explotación, las artes se vuelven serviles y decadentes porque “una cultura del miedo nunca ha producido una gran cultura” (Fujimura, 2017: p.129). La poesía parece ser el único campo que parece realmente creativo porque los poetas no dependen del comercio.

Sin embargo, “apreciar las profundidades de la belleza es una condición imprescindible para nuestra salud física, mental y espiritual” (Fujimura, 2017: p.47). “En último término el arte no es ‘útil’. No sirve a ninguna función práctica. Y esta es la razón por la que es indispensable” (Fujimura, 2017: p.81). Las artes son una anomalía para el capitalismo porque pertenecen primariamente al recinto de la economía del don (Fujimura, 2017: p.99).

Y ahí reside la clave de la revolución cultural que es cada vez más urgente: “La belleza es un don gratuito y nuestras almas están hambrientas de belleza”. “Conectar la justicia con la belleza es esencial. Toda causa en la que creamos necesita un canto” (Fujimura, 2017: pp.68 y 51).

Referencias

  • Fujimura, Makoto (2017) Culture Care: Reconnecting with Beauty for Our Common Life. Downers Grove (Illinois): InterVarsity Press: IVP Books.