Laicidad para convivir

JESÚS DOMINGO MARTÍNEZ. GIRONA | La laicidad es condición y garantía de la convivencia en la sociedad pluralista democrática en cuanto, precisamente, no recluye o silencia las diferencias, sino que asegura el respeto a todas; respeto que es condición para la búsqueda dialogal de las comunes bases pre-políticas de la pacífica convivencia en la sociedad pluralista.

Lo común a todos, los valores y exigencias compartidas por todos y susceptibles de ser impuestas a todos, eso es lo propio del pueblo, lo laico.

El laicismo, en cambio, en cuanto considera como condición del establecimiento de lo común la ausencia o exclusión o neutralización pública de todas las opciones positivamente religiosas, constituye una forma radical de rechazo del pluralismo, de la democracia, del mismo principio de laicidad.

Me parece justo que, en estos días en los que se ha vuelto a radicalizar alguno de los partidos, reflexionemos sobre la verdadera laicidad.

En el nº 2.792 de Vida Nueva.

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