Goya 2018: el cine español distingue a las mejores creaciones del último año

‘Vida Nueva’ te acerca algunas de las películas nominadas en esta 32ª edición de los Goya

Ernesto Sevilla y Joaquín Reyes, presentadores de la gala de los Premios Goya

‘La librería’ (12 nominaciones)

En contra de la oposición vecinal, Florence Green decide abrir en una pequeña localidad costera de la Inglaterra de 1959 la primera librería de la zona. Un establecimiento que no solo se convierte en motivo de discordia, sino que da título a la famosa novela de Penelope Fitzgerald adaptada por Isabel Coixet (nominada a mejor directora, como su película y su guión).

La historia nos narra el empeño de la dueña, una mujer humilde pero decidida (felizmente encarnada por la dulce Emily Mortimer, candidata a mejor actriz protagonista), en cumplir el sueño de su marido ya fallecido. Aunque para ello deba enfrentase a los prejuicios, chismorreos y envidias de su entorno.

El resultado es un drama de época sobre el coraje para sobreponerse a las adversidades y la pasión por la palabra escrita. Dos ejes argumentales que la realizadora catalana traduce en bellas imágenes y un caudal de silencios, miradas y diálogos que la propia Mortimer, Patricia Clarkson o Bill Nighy elevan a cotas de alto magisterio interpretativo.

‘El autor’ (9 nominaciones)

El móvil, un breve relato de juventud que supuso el bautismo literario de Javier Cercas hace ya tres décadas, da el salto a la gran pantalla de la mano de Manuel Martín Cuenca (nominado a mejor director, así como su película y su guión adaptado) con esta historia sobre un individuo corriente (un sobresaliente Javier Gutiérrez, candidato favorito a mejor actor protagonista) empeñado en escribir una novela que trascienda. ¿Tendrá talento para ello?

Durante el caluroso verano sevillano de 2017, nuestro protagonista trata de poner negro sobre blanco un texto a la altura de sus expectativas. Momento que elige el realizador andaluz para desplegar todo su arsenal narrativo y regalarnos una sátira envenenada en torno a las posibilidades (y trampas) de la realidad cuando se aspira a construir una ficción.

Un vecindario de lo más variopinto (atención a Adelfa Calvo en su papel de portera, aspirante al Goya a mejor actriz de reparto) y la obsesiva pretensión de su personaje por ahuyentar el fantasma de la mediocridad se convierten en sus mejores aliados. O no. El resultado es una película tan compleja y perversa como brillante, que nos lleva de la risa al escalofrío por los indescifrables laberintos humanos.

‘Verano 1993’ (8 nominaciones)

La protagonista tiene solo seis años. Acaba de perder a su madre y poco antes ha muerto también su padre. La nueva situación le obliga a trasladarse a una masía con sus tíos y su prima. Todo ocurrió en aquel estío que da título a la cinta.

Una treintañera catalana, Carla Simón (en busca del Goya a la mejor dirección novel, película y guión original) debuta en el largometraje con este relato autobiográfico que evoca aquellos días de mudanza y ausencias. Un período en el que la infancia herida de la niña que fue se enfrenta al hecho incontestable de la muerte de un ser querido.

Con elegancia y respeto, arrancando más sonrisas que lágrimas, la joven realizadora comparte un aprendizaje vital inolvidable –con sus hábitos, sus normas y sus límites–, que conducirá a su pequeña a entender lo que siente.

Un luminoso drama de cine de autor, que derrocha frescura en sus interpretaciones y acumula premios en su haber. No serán los últimos.

‘La llamada’ (5 nominaciones)

Los jovencísimos Javier Ambrossi y Javier Calvo (aspirantes a la mejor dirección novel y mejor guión adaptado) trasladan a la gran pantalla la función teatral del mismo nombre que lleva más de cuatro años conquistando al público con sus risas, sus canciones y sus bailes. Una comedia musical acerca de la vocación y la búsqueda de la identidad y de un lugar en el mundo.

La acción se sitúa en un campamento para chicas dirigido por monjas, en el que la insólita aparición de Dios a una de las jóvenes viene a cambiar las vidas de todas ellas. El salto generacional, musical y religioso entre unas y otras, amén de su extraordinario reparto, se encargan de hacer el resto.

El resultado es una película de aquí y ahora, atrevida –que no ofensiva–, bastante menos inocente de lo que podría sugerir su disparatado punto de partida, un derroche de energía, frescura y complicidad que inocula en el espectador las endorfinas del “buen rollo”.

‘No sé decir adiós’ (3 nominaciones)

La enfermedad terminal del cabeza de familia (Juan Diego) reúne a dos hermanas tan distintas como distantes. Una (Nathalie Poza, en el mejor papel de su carrera y una de las grandes favoritas al Goya a mejor actriz) vuelve a sus raíces mientras apura la última oportunidad para recomponer la relación rota con su padre. La otra (Lola Dueñas, dispuesta a sumar su tercer “cabezón”, esta vez como actriz de reparto) se convierte en testigo paciente de un tira y afloja comparable al que mantienen la vida y la muerte.

Lino Escalera, candidato a la mejor dirección novel, debuta en el largometraje y en pantalla grande con un drama hiperrealista y seco, la crónica pudorosa de una despedida y de un reencuentro a tres voces. También de una pérdida y de las resistencias invisibles que activa la partida de un ser querido.

Con un discurso reconocible y conmovedor, este viaje camino del duelo lo tiene todo para ser recordado como uno de los títulos más importantes del cine español de 2017.

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