Cuando restan tres días para que concluya el cese a las hostilidades y al fuego bilateral, pactado entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) y la misión de verificación de la ONU lanzan un llamado a las partes, a fin de “preservar los logros obtenidos en materia de reducción de violencia durante los meses de vigencia del cese al fuego”, que inició el 1 de octubre y se extiende previsiblemente hasta el 12 de enero.
Así lo han manifestado las dos instituciones, este lunes 8 de enero, a través de un comunicado conjunto en el que expresan que “son conscientes de las dificultades del cese al fuego temporal y de la falta de consenso en relación a la implementación de determinados aspectos del Acuerdo de Quito”.
Más confianza
Tanto la CEC como la ONU “comparten la necesidad de un acuerdo de cese al fuego más robusto que genere mayor confianza entre las partes y en la sociedad colombiana”, al tiempo que destacan “el alivio humanitario que el cese al fuego temporal ha representado para las comunidades y la disminución de la violencia en la mayoría de las zonas afectadas por el conflicto”.
A nivel nacional y local, la misión de la ONU estableció 33 equipos de verificación durante el cese, mientras que la CEC, el ELN y el Gobierno llevaron a cabo acciones pedagógicas, con el fin de evitar incidentes armados.
No obstante, a pesar del compromiso en el cumplimiento de los protocolos acordados, el pasado 8 de noviembre la CEC y la ONU alertaron –a través de un comunicado– sobre los “serios desafíos a la seguridad de las comunidades que viven en zonas de conflicto”, particularmente en Tumaco (Nariño), Chocó, el Catatumbo (Norte de Santander), Buenaventura (Valle del Cauca) y el norte del Cauca.
Perseverar en los diálogos
Con todo, ante el complejo escenario de la paz con el ELN, la CEC y la ONU exhortan a “perseverar en los diálogos, avanzar en la reducción de la violencia y consolidar y ampliar los beneficios logrados para las comunidades desde el establecimiento del cese al fuego el 1 de octubre”.
Por su parte, antes de que el equipo negociador del Gobierno viajara a Quito, el pasado lunes, para reiniciar los diálogos con el grupo guerrillero, el presidente Juan Manuel Santos, anunció que “estamos más que dispuestos a prorrogar el cese al fuego con el ELN y a renegociar las condiciones de un nuevo cese”.
