Es el nuevo “invento” de Francisco. Jornada Mundial de los Pobres. El próximo domingo, 19 de noviembre, ellos en el centro para combatir la cultura de la indiferencia. “Los pobres ya no nos duelen”, señala el director de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Fernando Fuentes, en un encuentro con periodistas celebrado hoy, 15 de noviembre. Y es que “nos estamos acostumbrando a la pobreza”, recalca.
El departamento de Pastoral Social, responsable también de Cáritas, ha asumido la celebración de esta jornada, con la que el Papa “quiere animar a las comunidades cristianas a preparar y poner en marcha acciones concretas a favor de los descartados de la sociedad”, según indica Fuentes. Las jornadas son el estreno de un hecho que el Papa quiere que se convierta en tradición en la Iglesia, porque “necesitamos fechas para recordar momentos importantes”, dice el sacerdote. Además, es una medida que va en continuación del Año de la Misericordia, donde “se llama a la Iglesia a que permanezca en su atención a los pobres.
“No amemos de palabra sino con obras”. Es el título del texto con el que Francisco llama a su Iglesia a mirar con otros ojos a los descartados. Al mismo tiempo, el padre Fernando invita a “no quedarnos en la teoría, en los estudios sociológicos”. En sus palabras a los medios, el director del secretariado se posiciona contra la cultura del descarte, “instalada en nuestra sociedad y que no cesa de generar injusticia y desigualdad en el mundo, que vive un estado de indiferencia generalizado”.
“La pobreza no entiende de ideologías”
La Santa Sede ha preparado un subsidio litúrgico y un guión para las homilías que se pronuncien el domingo, para que toda la Iglesia grite a una voz contra la indiferencia, porque “es la hora de sentarnos con los pobres en la Eucaristía”. En esta nueva cita con los necesitados, el Papa “nos pide que los invitemos a nuestra mesa, porque la cercanía es muy importante en su pontificado”. Y añade: “Debemos hacernos cada vez más sensibles a esta realidad”. Al ser preguntado sobre la ideologización de la pobreza, el sacerdote aclara que “la pobreza no entiende de ideologías”. “Tenemos que superar está concepción”, continúa.
La Conferencia y Cáritas invitan a responder con obras al grito de los pobres. Y se trata de obras concretas, ya que esta jornada no se ha creado como una colecta, sino como una jornada de reflexión para compartir y ponerse en acción en favor de los últimos. En este punto, el sacerdote muestra la preocupación del Episcopado por la feminización de la pobreza, en relación a la trata. Y también sus desvelos por la situación de los migrantes y refugiados, “sin olvidar ninguna otra pobreza”. A este respecto, se muestra “esperanzado” por que los corredores humanitarios encuentren su espacio en España.
Por otro lado, sobre el documento ‘Iglesia Servidora de los Pobres’, Fuentes agradeció su implementación, porque “aunque es un documento joven, es un texto base de la Iglesia y va sustanciándose”. Al respecto de este y los informes de Cáritas, el sacerdote advirtió, tras ser preguntado, que es lógico que a la clase política le molesten estos datos. No obstante, “es obligatorio para nosotros alzar la voz y denunciar”.
