“Hoy todos nos sentimos especialmente golpeados tras este acontecimiento de Barcelona, además con los medios de comunicación social se puede oír casi al unísono la misma voz”. Así se expresaba el arzobispo de Valladolid ante los micrófonos de la cadena Cope, tras el atentado terrorista en las Ramblas de Barcelona que acabó con la vida de al menos 13 personas y provocó un centenar de heridos, el presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, reflexionaba sobre el alcance de este ataque.
Al inequívoco rechazo a la violencia, Blázquez apuntó que “tenemos que unir a la condena, el trabajo unidos por paz. En la paz estamos todos concernidos. Si no, la humanidad sería un caos. Por otra parte, los cristianos sabemos que uno de los nombres muy relevantes que Jesús recibe en el nuevo testamento es ‘Jesús es nuestra paz’”.
Después de que el Estado Islámico se atribuyera el atentado, el presidente del Episcopado señaló que “el camino nunca es la violencia terrorista, el respeto de todas las personas es el verdadero camino de la construcción del futuro y de la paz ahora y siempre. Lo demás es una herida a todos nosotros”. En esta misma línea, señaló que “ninguna persona puede apoyarse en la violencia en ninguna forma, ni en la condición humana ni en lo religioso”.
La fe no se impone
De esta manera, el cardenal quiso desmarcar el hecho religioso del terrorismo en La Linterna de Cope: “Ninguna idea religiosa justifica la violencia. La fe no se transmite violentamente, se transmite imponiéndola, sino proponiéndola con entusiasmo. La persona responde desde la libertad más profunda para decir sí a Dios. La fe no se impone, el Evangelio se propone”.
En esta misma línea, subrayó que el Islam es una religión de paz: “No se puede identificar a los terroristas con el Islam. Hay muchos musulmanes amigos de la paz y pacificadores en su entorno. El Estado Islámico un tumor que ha surgido y que nos amenaza a todos: musulmanes, cristianos y a la humanidad entera”
Así, recordó que “los musulmanes son cuantitativamente el mayor número de víctimas del DAESH. Los cristianos también estamos intencionadamente bajo su punto de mira”.
