La Iglesia española impulsa una bioética para construir puentes

  • La Fundación Pablo VI crea el Observatorio de Bioética
  • Su coordinador, José Ramón Amor Pan, lamenta que hasta ahora han proliferado desde el ámbito católico “respuestas muy simplistas, apologéticas” y que han roto el diálogo

Bioética

La Iglesia española, en su proceso de estar cada vez más en sintonía con el pontificado de Francisco, da un significativo paso con la creación del Observatorio de Bioética por parte de la Fundación Pablo VI. El hecho de que sea esta la entidad promotora del Observatorio es relevante, pues se trata de una de las entidades más ligadas a la oficialidad católica en España: instituida en su día por el cardenal Herrera Oria, fue erigida por la Santa Sede y, además de ser el campus de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA) en Madrid, está integrada en su patronato por varios obispos, por lo que es muy estrecha su vinculación a la Conferencia Episcopal.

En declaraciones a Vida Nueva, José Ramón Amor Pan, designado coordinador del Observatorio, explica que “la Fundación Pablo VI busca en estos meses tener una mayor incidencia social y mostrar un estilo pastoral basado en el diálogo y en el construir puentes, en consonancia con el mundo plural y multicultural en el que vivimos y de acuerdo con lo que nos pide el papa Francisco”. Consciente de que desde el ámbito católico en España esta es una tarea pendiente, pues han proliferado “respuestas muy simplistas, apologéticas y que han destruido muchos puentes”, el también director del Máster de Bioética de las universidades de A Coruña y Santiago de Compostela, ahora se fomentará “un nuevo talante”, siempre en la búsqueda de “una ética global, al servicio de un futuro decente para la humanidad”.

Además de la labor divulgativa (en la web de la Fundación Pablo VI se propondrá una selección diaria de artículos, conferencias o congresos sobre diferentes cuestiones bioéticas), el Observatorio ofrecerá a partir de enero una serie de cursos específicos y abiertos a “un público heterogéneo”, desde personal sanitario, sacerdotes, religiosos o laicos, con la idea de todos ellos “sepan dar respuesta de su fe” en cuestiones ciertamente complejas.

Por ahora, los tres cursos confirmados versarán sobre la relación de la bioética con la oncología, con el poshumanismo y con la discapacidad intelectual y la salud mental.

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