Francisco viajará a Bangladesh y Birmania en noviembre

  • La tercera gira asiática del Papa subrayará el diálogo interreligioso en dos países de mayoría musulmana
  • Será el primer Pontífice en visitar Myanmar, después de cinco siglos de presencia misionera en el país

El Papa Francisco, con la premio Nobel de la Paz de Birmania (Myanmar), Aung San Suu Kyi/CNS

Noviembre es el momento elegido por el Papa Francisco para viajar a Bangladesh y Birmania –Myanmar-. Se trata de la tercera peregrinación que Jorge Mario Bergoglio realizaría a tierras asiáticas. Según ha podido confirmar Vida Nueva, la primera intención de la Santa Sede para este nuevo periplo eran India y Bangladesh.

Sin embargo, la falta de colaboración e interés mostrado por el Gobierno indio que a pie de calle no le está poniendo fácil el trabajo a la Iglesia católica, en especial a los misioneros, habría obligado a cambiar los planes inicialmente previstos.

El nuevo viaje tiene un claro sentido de promover el diálogo interrelegioso, de poner en valor cómo en países de una abrumadora mayoría musulmana como Bangladesh y Birmania se ha  respetado a las demás confesiones, en concreto, a la cristiana”, explican fuentes cercanas a la Santa Sede.

Relaciones diplomáticas

En el caso de Myanmar, después de cinco siglos de historia misionera, en estos últimos años está viviendo su particular primavera después de una dictadura militar de casi cinco décadas y cuenta ya con un 6% de los católicos. Prueba de ello es la creación como cardenal al arzobispo de Yangon, Charles Maung Bo, el primer purpurado en la historia del país.

Además, este mismo año se restablecían las relaciones diplomáticas entre los Estados, tras la visita de la premio Nobel de la Paz birmana, Aung San Suu Kyi. Ahora Francisco también se convertirá en el primer Papa en viajar a esta nación asiática.

Bangladesh, por su parte, cuenta con apenas un 0,3% de católicos y ya fue visitada por Juan Pablo II. Francisco también les “premió” de alguna manera en el consistorio de 2016 con el cardenalato al arzobispo de Daca, Patrick D’Rozari.

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