“Cada obispo de Colombia pensaba a su manera sobre el referéndum”. Octavio Ruiz Arenas, antiguo arzobispo de Villavicencio y actual secretario del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, no esconde la enorme fractura que abrió en la sociedad y en la Iglesia colombiana la consulta organizada por el Gobierno de Juan Manuel Santos en octubre de 2016 para refrendar el plan de paz al que llegó con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
“Es la primera vez que el Episcopado colombiano está tan dividido, se ha producido una polarización como ha ocurrido en todo el país. La mitad estaba a favor del referéndum y la otra mitad en contra”, explicó Ruiz Arenas en un reciente encuentro con periodistas en Roma, dejando claro, no obstante, que a Santos hay que reconocerle sus esfuerzos para alcanzar la reconciliación.
“Todos debemos luchar por la paz, aunque muchos no están de acuerdo con lo que se ha firmado en los acuerdos. Hay quien dice que el Estado ha concedido demasiado y que habrá una situación de impunidad entre aquellos que cometieron crímenes, pues no irán a la cárcel”, advirtió.
Pese a que estas discrepancias sociales tienen su reflejo entre los prelados, la jerarquía eclesiástica “siempre ha buscado soluciones” para el conflicto armado que sufre Colombia desde hace medio siglo y que ha causado más de 260.000 muertos y siete millones de desplazados. (…)
Como todos los fieles colombianos, él también tiene la vista puesta en el viaje que Francisco realizará al país latinoamericano del 6 al 10 de septiembre. “Esperemos que la visita del Papa pueda ayudar a avanzar en el ámbito de la reconciliación”. (…)
