Libros

‘Orar y contemplar en Cuaresma’


Una obra de Luis Fernando Crespo (PPC). La recensión es de Fernando Cordero, SS.CC.

Orar y contemplar en Cuaresma, libro de Luis Fernando Crespo, PPC

Título: Orar y contemplar en Cuaresma. Ecce homo

Autor: Luis Fernando Crespo

Editorial: PPC

Ciudad: Madrid, 2017

Páginas: 128

FERNANDO CORDERO, SS.CC. | El religioso marianista madrileño Luis Fernando Crespo, presidente de SM, nos propone una herramienta contemplativa necesaria para la Cuaresma. Necesaria porque, en este tiempo fuerte, la Iglesia redobla la llamada al cuidado de la oración personal y comunitaria.

La singularidad de la obra radica en que nos regala un material que se puede utilizar con realismo en nuestra comprimida cotidianidad, porque brevemente nos zambulle en la oración a través de un epígrafe bíblico, unas preciosas oraciones de calado poético, fotografías y textos de poetas de la talla de Vicente Gallego, Emily Dickinson, Juan Ramón Jiménez, Keats, Ángel Darío Carrero o Luis Miguel Uriarte, entre otros. Una original lectio divina a la que no le falta la música, porque es un texto de tal intensidad que va acompañado del imprescindible instrumental del silencio, que posibilita la elevación del espíritu orante.

En estas páginas descubriremos al Ecce homo que continúa su sufrimiento en nuestros hermanos en las más diversas situaciones de vulnerabilidad y dolor: tantos ancianos, niños desprotegidos, refugiados, presos y personas sin brújula ubicados en la intemperie silente de la desorientación. Iconos desnudos de nuestro mundo atados a la columna, sintiendo el flagelo de la indiferencia que hace sangrar a la humanidad.

Cristo está en el hermano, en los rostros sufrientes. De manera certera y transparente lo expresa el autor en sus plegarias: “Tu ser sufriente te hace cercano a la humanidad que sufre, que se aleja del ser en su dolor. Siervo de los siervos” (p. 104).

Se nos brindan en total 151 meditaciones que van desde el Miércoles de Ceniza a la Vigilia Pascual, incluyendo algunas fiestas dentro de la Cuaresma como la Cátedra de San Pedro, San José y la Anunciación del Señor. Es precisamente en María donde estallan sonoros los dones de la discípula y maestra de corazón: “Sorpresa, serenidad, abandono, confianza, apertura, entrega, disponibilidad, fertilidad, encuentro, alegría, paz…” (p. 122).

Mención especial merecen las fotografías captadas por Maribel Balius, Isabel Cano, Pablo Rambaud o el propio Luis Fernando. Diferentes miradas unidas por la misma sensibilidad, la de revelar al Ecce homo en nuestros prójimos de los diversos continentes. Miradas que captan también la belleza de la naturaleza, de esculturas de diferentes épocas y culturas, como resonancias de lo inmemorial que también se da cita en la Cuaresma de nuestro presente.

Llama la atención una Lázara envuelta en escarlata a la que apenas se le distingue el rostro y un vaso de plástico para acoger alguna limosna. O la silueta de un joven en lo alto de un edificio rodeado por una barandilla que atisba una naturaleza que dibuja su horizonte en el cielo. Un moderno alero del templo al que arrastran tantas ofertas del sinsentido y las adicciones.

Las imágenes se pueden utilizar, junto con las meditaciones, en reuniones de grupos de adultos y de jóvenes. Y, por supuesto, en el ritmo que cada cual quiera plantearse en este camino hacia la Pascua.

Publicado en el número 3.026 de Vida Nueva. Ver sumario

Actualizado
03/03/2017 | 00:09
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