La iniciativa, merecedora del Premio René Cassin, ha salvado la vida a 500 refugiados
Cesare Zucconi (centro), durante la entrega del galardón
VICENTE L. GARCÍA (VITORIA) | La Comunidad de Sant’Egidio y la Federación de Iglesias Evangélicas en Italia son los responsables de los llamados corredores humanitarios, que hasta la fecha han salvado de la guerra ya a 500 personas. Esta labor ha sido reconocida con el Premio René Cassin con el que, desde 2003, el Gobierno del País Vasco distingue la atención a las personas refugiadas, y que fue entregado el 12 de diciembre por el lehendakari Íñigo Urkullu.
Los corredores humanitarios tienen como objetivo evitar los viajes en frágiles embarcaciones por el Mediterráneo que están costando miles de vidas. Al mismo tiempo, se trata de impedir el tráfico de personas y conceder a quienes se encuentran en condiciones de vulnerabilidad un ingreso legal en suelo italiano con la posibilidad de presentar una demanda de asilo.
Así lo resumía Cesare Zucconi, secretario general de Sant’Egidio, quien que se desplazó hasta Vitoria-Gasteiz acompañado por el presidente de esta organización en Barcelona, Jaume Castro. En declaraciones a Vida Nueva, Zuconni sostiene que este modelo se puede reproducir en otros países. “En España, estamos en negociaciones con el Gobierno para que esto sea posible. Hay un clima en la sociedad civil que capacita para ello. Estamos en negociaciones para que el Gobierno pueda conceder este visado humanitario a tiempo parcial y que se pueda establecer un canal legal y seguro sin modificar la legislación. Hay varias diócesis también que, desde sus propias realidades comunitarias, posibilitarían la acogida en sus respectivas comunidades autónomas. Estamos también en un proceso bastante avanzado con Francia que posibilite, en breve, abrir un corredor humanitario hacia ese país. Y también sucede lo mismo con la Iglesia y el gobierno de Polonia”.
Los otros galardonados en esta edición de los premios René Cassin han sido Salvamento Marítimo Humanitario y Zaporeak-Sabores Solidarios, una iniciativa de la sociedad donostiarra Intxaurrondoko Gastronomia Elkartea, creada inicialmente para apoyar al misionero vasco Ángel Olaran en Etiopía, pero que, ante la crisis humanitaria de los refugiados, amplió sus recursos para las personas que llegaban a las costas de Grecia.
Publicado en el número 3.016 de Vida Nueva. Ver sumario
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