‘María (y los demás)’

fotograma de la película María y los demás

fotograma de la película María y los demás

J. L. CELADA | Atrapada entre el sentido de la responsabilidad familiar y la urgencia de abrirse camino en la vida. Así comparece en pantalla la protagonista de María (y los demás), una treintañera sin pareja ni oficio estables, más ocupada en ser hija y/o hermana que en atender sus necesidades como mujer. No solo las afectivas o laborales, sino todas las que configuran una personalidad femenina –como tantas otras– sujeta a las obligaciones de su entorno más cercano aun a costa de perder el tren del futuro.

Tras su exitoso corto Pablo (2009), Nely Reguera se estrena en el largometraje con una historia muy rica en matices, como esa joven a la que sigue con su cámara. Entregada desde la muerte de su madre al cuidado de su padre (José Ángel Egido), ahora aquejado de cáncer, la María del título (Bárbara Lennie componiendo un papel para el recuerdo) es un personaje desconcertante: bajo un carácter fuerte y controlador, late un espíritu frágil, víctima de la desorientación sentimental y el temor a los cambios. Porque mostrarse siempre tan pendiente de su progenitor no le libra de escenificar en público sus dudas y hasta sus celos.

Pero su aparente equilibrio existencial amenaza con venirse abajo cuando el patriarca del clan anuncia su próximo enlace con una de las enfermeras que le asistió en el hospital. Todo coincide con su cumpleaños. Ocasión propicia, como las bodas, para esos exorcismos colectivos que el cine organiza con frecuencia en torno a una mesa (Secretos y mentiras, Celebración, Agosto…).

Sale a relucir entonces la capacidad de observación de una directora que describe con trazos sutiles el universo más íntimo de su protagonista: sus heridas emocionales, que supuran en forma de pullas hacia sus hermanos y cuñadas, y sus sueños de novelista (¡ojo al impagable momento que nos regala Lennie frente a un público imaginario en la librería donde trabaja!). Junto a los suyos (familia, amigos, amante, jefe…), esos que la propia Reguera sitúa también entre paréntesis para subrayar la soledad de su criatura, nuestra desubicada heroína pone al mal tiempo buena cara. Aunque no evite compartir sus ahogos en un día ventoso de playa.

Fiel reflejo de este caudal de sentimientos encontrados, María (y los demás) tampoco se somete fácilmente a la etiqueta de un género concreto. La luminosidad de su puesta en escena y la ligereza de ciertos diálogos, que nos harían pensar en una comedia, conviven con los aguijonazos nada amables y muy realistas del melodrama agridulce. Así es esta película, hecha de pequeños gestos y grandes verdades; concebida sin mayores pretensiones, pero llamada a convertirse por mérito propio –y de su actriz principal– en una de las sorpresas más agradables del año cinematográfico a punto de concluir.

FICHA TÉCNICA

Título original: María (y los demás)

Dirección: Nely Reguera.

Guión: Nely Reguera, Eduard Sola, Valentina Viso, Roger Sogues, Diego Amexeiras .

Fotografía: Aitor Echeverría.

Música: Nico Casal.

Producción: Luisa Romeo.

Intérpretes: Bárbara Lennie, José Ángel Egido, Pablo Derqui, Vito Sanz, Marina Skell, Julián Villagrán, Alexandra Piñeiro, Rocío León, María Vázquez, Luisa Merelas.

Publicado en el número 3.016 de Vida Nueva. Ver sumario

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