Francisco: “¡Que ningún hombre ose jamás derramar la sangre de su hermano!”

papa Francisco reza el ángelus desde el balcón el domingo 17 de julio rezando sobre Niza

El Papa condena la “locura homicida” del atentado en Niza

papa Francisco reza el ángelus desde el balcón el domingo 17 de julio rezando sobre Niza

Francisco, durante el Ángelus en el que pidió el cese del terror

DARIO MENOR (ROMA) | Los tres días que van del 12 al 15 de julio de 2016 serán recordados como jornadas funestas en los tres países más poblados de la ribera norte del Mediterráneo. El martes 12, dos trenes chocaron en un tramo de vía única en la región de Apulia, en el sur de Italia, dejando un saldo de 23 muertos y 50 heridos. Dos días después, el terrorismo islámico volvía a cebarse con Francia, esta vez en Niza, donde fallecían 84 personas y otra cincuentena quedaban al borde de la muerte tras ser arrolladas por un camión mientras participaban en los festejos del día nacional galo en el paseo de los Ingleses de esta localidad costera. La noche siguiente al atentado en Francia, le tocaba el turno a Turquía, con el intento de golpe de Estado de una parte del Ejército contra el presidente islamista moderado Recep Tayyip Erdogan.

Aunque el papa Francisco está durante estos días de vacaciones, al menos tal y como él las entiende (“bajo el ritmo pero sin dejar mi hábitat”, comentó hace dos años en el vuelo que le traía de regreso desde Corea), sigue la actualidad y responde a ella, tratando siempre de confortar a sus víctimas.

“Grandísima preocupación” por Niza

Tras el desastre ferroviario de Apulia, el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado, envió un telegrama al arzobispo de Bari-Bitonto, Francesco Cacucci, en el que le trasladó el pésame del Pontífice y le aseguró sus “fervientes oraciones” por los fallecidos en el accidente. A Parolin le tocó enviar otro telegrama de pésame el viernes, días después del atentado en Niza. En este caso, el destinatario fue el arzobispo de la ciudad francesa, André Marceau.

En el texto, el secretario de Estado manifestó la “condena” del Papa a estos actos y manifestó su “profunda tristeza y proximidad espiritual con el pueblo francés”. Posteriormente, el todavía portavoz, Federico Lombardi, explicó que en el Vaticano se siguieron con “grandísima preocupación” las noticias llegadas desde Niza y que el Pontífice condenaba “de la manera más absoluta cualquier manifestación de locura homicida, de odio, de terrorismo y cualquier ataque contra la paz”.

Tras el rezo del ángelus del domingo 17 desde la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico, Jorge Mario Bergoglio habló de lo sucedido en la ciudad de la Costa Azul. “Está vivo en nuestros corazones el dolor por el atentado que, durante la noche del jueves pasado en Niza, ha segado tantas vidas inocentes, incluso las de tantos niños”, afirmó. “Estoy cerca de cada familia y de la entera nación francesa de luto. ¡Que Dios, Padre bueno, acoja a todas las víctimas en su paz y consuele a sus familiares! ¡Que acabe con cualquier proyecto de terror y de muerte para que ningún hombre ose jamás derramar la sangre de su hermano!”.

Bergoglio podría acompañar sus palabras con un significativo gesto: se espera que reciba en fechas próximas en el Vaticano a los familiares de las víctimas del atentado, según contó el presidente de la asociación Amitié France-Italie, Paolo Celi, tras recibir una llamada del Pontífice. “Lo primero que me dijo fue ‘¿qué puedo hacer por ustedes?’”, comentó Celi.

Aunque el Vaticano no quiso hacer comentario alguno sobre los graves acontecimientos que se sucedieron en Turquía tras el golpe de Estado, la Secretaría de Estado siguió con preocupación las purgas desatadas por el Gobierno. Así, L’Osservatore Romano, el diario de la Santa Sede, informó de la depuración realizada en la Administración turca con un elocuente titular en su primera página de la edición del miércoles 20 de julio: “Erdogan elige la línea dura”.

jóvenes participantes en el encuentro Together 2016 en Washington a los que Francisco envió un mensaje julio 2016

Una imagen del ‘Together 2016’

Mensaje a los jóvenes

Por ora parte,a pocos días de viajar a Polonia, donde permanecerá del 27 al 31 de julio para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que se celebra en Cracovia, el papa Francisco calentó motores con el videomensaje que envió el martes 19 a los miles de jóvenes que acudirán a este evento multitudinario desde un total de 187 países. En él les dice que desea encontrarse con ellos “para ofrecer al mundo un nuevo signo de armonía, un mosaico de rostros diferentes, de tantas razas, lenguas, pueblos y culturas, pero todos unidos en el nombre de Jesús, que es el Rostro de la Misericordia”.

Al dirigirse en particular a la juventud polaca, alabó el Papa las muchas “pruebas, algunas muy duras”, que ha tenido que pasar esta nación a lo largo de su historia. “Ha salido adelante con la fuerza de la fe, sostenida por la mano materna de la Virgen María”, reconoció Francisco, despidiéndose de todos ellos con estas palabras: “Permanezcamos unidos en la oración. ¡Y nos vemos en Polonia!”.

Pero no fue este el único videomensaje grabado por el Pontífice durante estos últimos días. Envió también otro a los participantes en el evento ‘Together 2016’ (Juntos 2016), una cita de carácter ecuménico que tuvo lugar en la ciudad estadounidense de Washington el sábado 16 de julio, un acontecimiento en el que participaron alrededor de 350.000 personas y en el que fue leída una carta enviada por el presidente Barack Obama a los allí congregados.

“Chicos y chicas, yo sé que ustedes en el corazón tienen algo que los mueve, que están inquietos, porque un joven que no está inquieto es un viejo, y ustedes tienen juventud y la juventud crea inquietud. Te pregunto: ¿cuál es tu inquietud? ¿Sabes bien cuál es tu inquietud? ¿O no sabes? ¿Querés saber cuál es tu inquietud?”, comentó el Pontífice, insistiendo a continuación en que Jesús “espera” y “no desilusiona” a nadie. “Animate, no tenés nada que perder, probá y después me contás”, concluyó Jorge Mario Bergoglio su videomensaje en español con acento porteño.

Miguel Ángel Ayuso estrecha lazos entre el Vaticano y Al-Azhar

Pocos saben tanto sobre el islam en el Vaticano como el obispo Miguel Ángel Ayuso Guixot, secretario del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso, cargo que ocupa desde hace cuatro años tras dirigir antes el Pontificio Instituto de Estudios Árabes e Islámicos (PISAI). El comboniano andaluz se encargó una vez más de seguir tendiendo puentes con los musulmanes durante el encuentro que mantuvo en El Cairo el 13 de julio con Mahmoud Hamdi Zakzouk, director del departamento de diálogo exterior de Al-Azhar y miembro del consejo de esta universidad egipcia, la más prestigiosa del mundo suní.

La cita había sido pedida por Francisco, quien recibió el 23 de mayo en el Vaticano al gran imán de Al-Azhar, Ahmad Al-Tayyib, la voz más escuchada dentro de la familia mayoritaria del islam. Bergoglio promovió el encuentro entre Ayuso y Zakzouk para impulsar el diálogo entre el Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso y la universidad de Al-Azhar, congelado desde 2011 después de que Al-Tayyib calificara de “injerencia” la condena de Benedicto XVI al ataque a una iglesia copta egipcia.

La reunión, según el Vaticano, se desarrolló en un clima “muy cordial” y propició un diálogo “sincero y provechoso” para ambas instituciones, que comparten interés por la promoción del “bien de la humanidad” y por reforzar “los vínculos entre cristianos y musulmanes”. Ayuso planteó los términos del próximo encuentro que celebrarán estos dos organismos.

En el nº 2.998 de Vida Nueva

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