Canarias revisará los protocolos de atención a inmigrantes

Cáritas exigió una mejor coordinación tras el trato recibido por los tripulantes de la última patera llegada a las islas

Inmigrantes atendidos en el garaje de la Comisaría de Maspalomas (Canarias)

R. CRUZ | “Exigimos corresponsabilidad y mayor y mejor coordinación para respetar los derechos humanos de todas las personas migrantes que lleguen a nuestras islas, mediante la disposición de medios suficientes para una atención eficaz y eficiente y, especialmente, garantizar el derecho a la salud de aquellas personas que más lo necesitan”. De esta manera se manifestaron, el pasado 16 de febrero, en un comunicado conjunto Cáritas diocesana de Canarias, Cáritas diocesana de Tenerife, el secretariado diocesano de Pastoral de Migraciones de Canarias y la delegación diocesana de Migraciones de la Diócesis Nivariense tras el trato vejatorio recibido por los inmigrantes que llegaron a bordo de una patera al muelle de Arguineguín (Gran Canaria) el 7 de febrero.

Estas palabras han sido escuchadas por las instituciones canarias. Así, la Consejería de Sanidad y la Delegación del Gobierno en las islas están de acuerdo en que los protocolos de atención a los inmigrantes deben revisarse para ofrecer “respuestas excepcionales a situaciones excepcionales”. El delegado del Gobierno, Enrique Hernández Bento, confirmó el 21 de febrero que se reunió con el consejero de Sanidad, Jesús Morera, para analizar lo ocurrido.

“Consideramos que se trataba de una reflexión oportuna, porque lo que nos importan son las personas y ponerles voz ante un tema tan sensible. Por ello, nos alegramos de que realmente se establezcan mesas de diálogo. Entendemos que tiene que ser de esa forma, porque lo lógico es que haya protocolos compartidos para poder dar una mejor atención”, indica a Vida Nueva Jesús Alberto González, responsable de Cooperación Internacional de Cáritas Tenerife. Al mismo tiempo, añade que “está en juego la dignidad de las personas migrantes. Nos congratulamos por la rápida reacción de las instituciones y esperamos que esto no sea una pose de cara a los medios”.

Por su parte, Hernández Bento explicó que “los protocolos funcionan razonablemente bien, pero para estos casos específicos de cayucos que traen a personas que se encuentran en situaciones complicadas debemos establecer protocolos específicos”. El delegado del Gobierno y el consejero coincidieron en que, “evidentemente, algo falló ese fin de semana, como quedó claro a la vista de las imágenes que se han publicado”. Por su parte, Morera indicó que desde 2007 no se vivían en Canarias “eventos tan dramáticos”.

Mesa de trabajo

Por lo tanto, ambos organismos han acordado la formación de grupos técnicos que puedan valorar qué soluciones se pueden dar cuando llegan al archipiélago embarcaciones con inmigrantes en grave estado de salud. Y es que el cayuco que arribó a las costas de Gran Canaria lo hacía con 42 personas, que necesitaron atención médica tras cinco días en alta mar. De hecho, uno de ellos falleció. Al ser preguntado por los periodistas sobre la atención que recibieron los inmigrantes, el consejero respondió que, “cuando se da el alta a un paciente en un hospital, pensamos que van a convalecer con su familia, en una cama, en una habitación adecuadamente, con personas que les atienden”. Sin embargo no es así con una persona recién llegada, por eso, “hay que contemplarlo adecuadamente en los protocolos”.

Por su parte, Cáritas recordó que “no queremos acostumbrarnos a la repetición de sucesos como este”, puesto que ya el 6 de noviembre de 2014 se asistió al “bochornoso” traslado de las personas que llegaron en un cayuco a una playa de Gran Canaria en un camión de basura. “Entonces se alegaron lagunas en los protocolos y deficiencia en su aplicación. Entendemos que ha habido tiempo para subsanar las carencias en los mencionados protocolos”.

En el nº 2.978 de Vida Nueva