Su objetivo es fomentar nuevas alianzas entre la Iglesia, policía y sociedad civil
La Reina Sofía y monseñor Osoro, junto al resto de participantes del encuentro
RUBÉN CRUZ | Contribuir al bien y a la dignidad de todos los seres humanos. Poner a la persona en el centro. De eso se encarga el Grupo Santa Marta –iniciativa para la lucha contra la trata de personas, impulsada por el papa Francisco, que involucra a cuerpos de seguridad de varios países, episcopados, organizaciones sociales y representantes de varias confesiones religiosas–. La Casa de Ejercicios San José (El Escorial) acogió el pasado 30 y 31 de octubre la tercera reunión del grupo, que tiene su origen en la conferencia celebrada en Roma en abril de 2014. El objetivo del colectivo no es otro que armonizar los recursos de la Iglesia con las agencias de policía y la sociedad civil para prevenir las situaciones de explotación y esclavitud, así como ofrecer atención pastoral y readaptación a la vida de estas personas en sus comunidades de pertenencia.
Como no podía ser de otro modo, Francisco quiso hacerse presente en el acto a través de una carta: “Pido a Dios Todopoderoso que les dé la gracia de llevar adelante esta misión, tan delicada, tan humanitaria y tan cristiana, de curar las llagas abiertas y dolientes de la humanidad, que son también las llagas de Cristo. Con la ayuda de Dios y la colaboración de ustedes este indispensable servicio del Grupo Santa Marta podrá liberar a las víctimas de las nuevas esclavitudes, rehabilitar a los cautivos y excluidos, desenmascarar a los traficantes y a los creadores del mercado y rendir una asistencia eficaz a las ciudades y naciones; un servicio para el bien común y la promoción de la dignidad humana”.
Una “plaga moderna”
Por otro lado, el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, indicó que esta “plaga moderna” es un delito contra la humanidad, puesto que “detrás de la trata de seres humanos se enmascara un crimen de lesa humanidad, como es la explotación física, económica, sexual y psicológica de mujeres, hombres, niñas y niños que encadena a decenas de millones de personas”.
La reunión contra la esclavitud del siglo XXI estuvo presidida por la reina Sofía. Una presencia que el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, agradeció durante su intervención, ya que “refleja el máximo respaldo institucional y el grado de compromiso de nuestro país en la lucha contra la trata de seres humanos”. Del mismo modo, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, y otros representantes acompañaron a Su Majestad.
CONFER también se hizo presente en el encuentro a través de su presidente, Luis Ángel de las Heras. Asimismo, por su trabajo contra la trata, también asistieron religiosas de las adoratrices, oblatas y Villa Teresita. Este tercer encuentro “sirve de enorme aliciente por los logros que se han expuesto en la lucha contra la trata de seres humanos como reflejo de lo que se puede hacer coordinando eficientemente las fuerzas sociales para mejorar nuestro mundo”, explicó a Vida Nueva De las Heras, que también quiso recalcar el fuerte compromiso de algunas congregaciones en este campo.
En el mismo sentido, añadió que la Iglesia “debería incidir en el conocimiento, la experiencia y el contagio de la misericordia para extender el amor que cura heridas y que previene para evitar cualquier daño”.
Por su parte, Lourdes Perramón, superiora general de las oblatas, comentó a esta revista que el encuentro “ha sido una gran oportunidad para conocer la amplitud de países ya implicados en esta denuncia. También una ocasión para percibir cómo dos grandes instituciones, los cuerpos de seguridad y la Iglesia, con una cobertura prácticamente universal, pueden lograr alianzas ante una causa común”.
El encuentro concluyó con nuevos objetivos claros: “Buscar la participación de Latinoamérica, y atender y visibilizar otros tipos de trata, sobre todo la laboral, casi nada presente en el grupo hasta el momento”, remarcó Perramón. El Grupo Santa Marta apuesta claramente por la acción y no solo la reflexión. Es un claro ejemplo de la Iglesia en salida que quiere Francisco. Además, cuenta con su apoyo, que “en este momento eclesial es garantía de éxito”, dijo.
Las religiosas españolas, contra la esclavitud
En su compromiso por la dignidad de todas las personas, CONFER participó en Dublín (Irlanda), entre el 25 y el 31 de octubre, en un encuentro de la red europea de religiosas dedicada a trabajar contra el tráfico, la trata y la explotación de personas (RENATE) –integrada por 120 personas de 18 países europeos–.
La oblata Justa del Sol y la adoratriz Pilar Casas estuvieron presentes en el encuentro, que tuvo como objetivo desarrollar la capacitación para la transformación social.
En el nº 2.963 de Vida Nueva
