El presidente Evo Morales recibe al Papa en el aeropuerto y en el Palacio de Gobierno
El presidente Morales regaló a Francisco una hoz y un martillo con un crucifijo incrustado
M. GÓMEZ | Hacia las 16:30 hora local (22:30 horas en España), el papa Francisco descendió del avión en el aeropuerto de El Alto de La Paz y pisó Bolivia por primera vez. “Como huésped y peregrino, vengo para confirmar la fe de los creyentes, para que cuantos creemos en él seamos testigos de su amor, fermento de un mundo mejor y contribuyemos en la construcción de una sociedad solidaria”, dijo el Pontífice en la ceremonia de bienvenida en el propio aeropuerto.
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Al pie de la escalerilla del avión le recibió el presidente Evo Morales, encabezando la delegación de autoridades civiles, así con las autoridades religiosas del país.
El Papa recorrió un trecho a pie acompañado por Morales y por varios niños. A continuación, el presidente boliviano tomó la palabra en primer lugar: “Todos los bolivianos y bolivianas están muy felices porque has venido a visitarnos a nuestra casa y nos traes tu mensaje de fe y liberación“.
“Hermano papa Francisco: recibimos con los brazos abiertos al papa de los pobres, al que se identifica con san Francisco de Asís (…). Quien traiciona a un pobre, traiciona a Cristo. En tiempo de cambios, quien traicion a un pobre traiciona al papa Francisco”.
“Usted viene lleno de energía y ha llegado a una tierra de paz que busca justicia”, remató Morales.
Un momento de la ceremonia de bienvenida celebrada en el aeropuerto de La Paz
Urge un espíritu de colaboración ciudadana
En su respuesta, Francisco agradeció la “cálida acogida” recibida. “Me alegro de estar en este país de singular belleza (…). El mundo es algo más que un misterio a resolver, es un misterio gozoso que contemplamos con jubilosa esperanza y es una tierra bendecida en sus gentes con su variada realidad cultural y étnica que constituye una gran belleza y un gran llamado permanente al respeto mutuo y al diálogo”.
El grueso de su discurso lo dedicó a las cuestiones sociales. “Bolivia está dando pasos importantes para incluir a amplios sectores en la vida económica, social, y política del país –señaló–. Cuenta con una Constitución que reconoce los derechos de los individuos, de las minorías, del medio ambiente, y con unas instituciones sensibles a estas realidades. Todo esto requiere un espíritu de colaboración ciudadana, de diálogo y de participación de los individuos y los actores sociales en las cuestiones que interesan a todos”, consideró.
Y añadió: “El progreso integral de un pueblo incluye el crecimiento en valores de las personas y la convergencia en ideales comunes que consigan aunar voluntades sin excluir a nadie”. El Papa alertó del hecho de que el crecimiento sea solo material, y solicitó que, además de la transparencia institucional, “la cohesión social requiere un esfuerzo de los ciudadanos”.
También tuvo un mensaje para los pastores, al pedirles que su voz sea “profética” y que deben “hablar desde la opción preferencial y evangélica por los últimos, los descartados, los excluidos. Esa es la opción preferencial de la Iglesia.
Al hablar de la necesaria promoción integral de la persona, especialmente de los más vulnerables, el Papa aseguró que “no se puede creer en Dios padre sin ver a un hermano en cada persona, y no se puede seguir a Jesús sin entregar la vida por los que él murió en la cruz”.
Después de pedir medidas de protección concreta para familias, niños, jóvenes y ancianos, el Pontífice reiteró estar “alegre y contento de estar en esta patria que se dice pacifista, que promueve la cultura de la paz y el derecho a la paz”.
Visita a Evo Morales y encuentro con las autoridades civiles
Tras la ceremonia de bienvenida, el Papa realizó una visita de cortesía al presidente Evo Morales, en el Palacio de Gobierno, y una hora después mantuvo un encuentro con las autoridades civiles en la Catedral de La Paz.
Francisco se reunió de manera privada con el presidente. Lo que sí trascendió fue el intercambio de regalos, lo más sorprendente, el crucifijo sobre una hoz y un martillo que Morales entregó al Pontífice, así como un libro sobre la reivindicación de Bolivia contra Chile sobre el acceso al mar, y una autobiografía.
A continuación, el Papa se desplazó a pie a la cercana Catedral de La Paz, para mantener un encuentro con autoridades políticas y civiles de Bolivia, miembros del Cuerpo diplomático y personas relevantes del mundo de la cultura y del voluntariado. En su discurso, el Papa agradeció “la vocación de trabajar por el bien común”.
“Nos necesitamos unos a otros”, aseguró Francisco, exhortando a la política a que no se deje “dominar por la especulación financiera o la economía” ni se rija “únicamente por el paradigma tecnocrático y utilitarista de la máxima producción”, sino que hace falta también “la cultura”, “las tradiciones populares locales”, una “educación ética y moral” y “solidaridad y corresponsabilidad”.
Tuvo además palabras muy claras en favor de la libertad religiosa y del papel del cristianismo: “El cristianismo ha tenido un papel importante en la formación de la identidad del pueblo boliviano. La libertad religiosa es quien también nos recuerda que la fe no puede reducirse al ámbito puramente subjetivo. Será nuestro desafío alentar y favorecer que germinen la espiritualidad y el compromiso cristiano en obras sociales”.
“La libertad –había comentado un poco antes– siempre es el mejor ámbito para que los pensadores, las asociaciones ciudadanas, los medios de comunicación desarrollen su función, con pasión y creatividad, al servicio del bien común”.
Y por último solicitó a los gobernantes: “Una nación que busca el bien común no se puede cerrar en sí misma; las redes de relaciones afianzan a las sociedades. El problema de la inmigración en nuestros días nos lo demuestra. El desarrollo de la diplomacia con los países del entorno, que evite los conflictos entre pueblos hermanos y contribuya al diálogo franco y abierto de los problemas, es hoy indispensable. Hay que construir puentes en vez de levantar muros“.
Programa en Bolivia para el jueves 9
A las 20:00 h. (02:00 hora española), Francisco cogió de nuevo el avión para trasladarse a Santa Cruz de la Sierra, donde estará todo el jueves y parte del viernes.
Hoy jueves a las 10:00 h. (16:00 hora española) tendrá lugar la multitudinaria misa en la Plaza del Cristo Redentor. Y ya por la tarde (22:00 hora española), el encuentro con los sacerdotes, religiosos, religiosas y seminaristas en el colegio Don Bosco.
