La triste realidad

jscamachoJESÚS SÁNCHEZ CAMACHO | Profesor CES Don Bosco

“Cinco decenios después, tratamos de esquivar los mismos escollos…”


Su padre ha abandonado el hogar a causa de serios problemas con el alcohol. Tan solo tiene ocho años, y asiste a un teatro abarrotado de soldados. Recuerda esa noche como el trance que marcará la tristeza de una larga infancia de infortunios. En medio de la obra, la voz de su madre se quiebra. Él se abalanza sobre el escenario en un intento de imitar el sonido enfermizo de Lily Harvey. Ante semejante tándem, los militares rompen en una unísona carcajada, desvirtuada en toque de silencio para los artistas.

Esta infausta escena termina en el asilo de pobres de Lambeth. Cuando su madre tenga que ser internada en un hospital psiquiátrico, la suerte de Charles Chaplin le conduce hacia una escuela de huérfanos. Pero, como se subraya en el número 447 de Vida Nueva, “una sucesión de anécdotas hace un libro, no un hombre”. Con ochenta películas a sus espaldas, el artista que creó El Pequeño Vagabundo ha llegado a la cumbre, y lo explica en una publicación. Actualmente, hay muchos Charles Chaplin que se quedan en el camino de la puericia, resignándose a ser malabaristas en los vagones del metro o en los semáforos de la gran ciudad.

En el número 2.915, el periodista Malavia hace una radiografía de los de excluidos retratados en el Informe FOESSA 2014. Hace 50 años, el colaborador Pedroche entrevista a Francisco Guijarro, director nacional de Cáritas, quien anuncia “el primer estudio serio de acercamiento a la realidad española”. A través del Plan CCB, Cáritas ofrece un programa de actuaciones asistenciales en alimentación, enseñanza, sanidad, vivienda, trabajo y comunidad social. Cinco decenios después, tratamos de esquivar los mismos escollos. En plena democracia y era digital, ¿alguien podría haber presagiado que 12 millones de españoles practicarían acrobacias, equilibrios y malabares, pero para llegar a fin de mes?

En el nº 2.920 de Vida Nueva

 

MÁS DE ESTE AUTOR:

Compartir