Acercar el atractivo de la vida en comunidad a los jóvenes, desafío para la Vida Religiosa

CONFER reflexiona sobre cómo proponer la vocación consagrada en los tiempos actuales

E_Confer1

Acercar el atractivo de la vida en comunidad a los jóvenes, desafío para la Vida Religiosa [ver extracto]

MIGUEL ÁNGEL MORENO. FOTOS: CONFER. | Proponer la vida en comunidad, el compromiso con los pobres y romper los distanciamientos con los jóvenes fueron algunas de las claves que surgieron en las XLIV Jornadas de Pastoral Juvenil Vocacional de CONFER, que tuvieron como lema La inquietud del amor. Vivir y proponer la vocación consagrada hoy, y que se celebraron en el Colegio Nuestra Señora del Recuerdo, de Madrid, del 10 al 12 de octubre.

Afirmó el presidente de la confederación de religiosos, Luis Ángel de las Heras, a Vida Nueva:


La Vida Consagrada tiene un atractivo muy fuerte, que es la vida fraterna en comunidad, pero sobre todo, es un modo singular de vivir con Dios. La vocación a la Vida Consagrada, como cualquier vocación en la Iglesia, no es un estilo de vida sin más. Es una respuesta a la voluntad de Dios en la propia vida.

Ricard, un joven hermano de la Sagrada Familia, destacó durante las jornadas que la cercanía hacia los jóvenes es otro de los aspectos clave a la hora de proponer la Vida Consagrada. Aseguró:

El hecho de que no nos importa perder nuestro tiempo con la gente que trabaja con nosotros, atendiéndoles, invitándoles, teniendo cuidado de su vida y de su realidad.

Para este joven, la “alegría” debe ser fundamental en la propuesta vocacional. Reflexionó:

Como religiosos, es imposible que nos mostremos tristes. Y nuestra alegría es un poco confusa: esta gente que ha renunciado, ¿cómo puede ser que desde su vocación, que parece ser la de renunciar a muchas cosas, viva feliz? Yo creo que eso interroga y a la vez atrae.

Pilar, novicia de las Hermanas Apostólicas de Cristo Crucificado, enfatiza “la entrega a los demás”. “Es lo que más atrae; al fin y al cabo es el estilo de vida, lo que dice algo a los demás”, dijo.
 

Mitos y realidades

La oblata Carmen Ortega analizó en su ponencia los mitos y realidades que la sociedad y los jóvenes tienen sobre la Vida Consagrada. Para la religiosa, los votos son uno de los aspectos que generan más desconocimiento, aunque también alerta de cierto acomodamiento de los religiosos. Explica Ortega, que pulsó en una encuesta las opiniones de laicos y religiosos:

El modo de vida no se conoce y se ve como una cosa de otro mundo, sobre todo el voto de castidad. No se creen la castidad, y si se la creen, es vista como un ‘autoexterminio’. Hubo matrimonios jóvenes que me decían: ‘Yo nunca educaría a mi hijo para que se destruyese a sí mismo’.

Recordando su historia, Patricia, postulante de las Hermanas Apostólicas de Cristo Crucificado, encontró al iniciar su camino vocacional “reacciones de todo tipo”. “Desde los que te dicen que son cosas del pasado y no deberían existir, a los que te ven feliz y te dicen que adelante. Son posturas diferentes, pero te enriquecen”.

Sin embargo, la situación social también dibuja un camino de esperanza. “La sociedad en la que estamos nos puede y nos debe depurar. El anticlericalismo, el secularismo y el materialismo pueden ayudar a hacer una criba para que los religiosos recuperemos esa profecía, ese ser presencia y testimonio. Que seamos la ‘copia de seguridad’ de Jesús”, sugirió Carmen Ortega.
 

“El del papa Francisco es el mejor ejemplo que podemos proponer”

Pascual Chávez, hasta el pasado mes de marzo rector mayor de los salesianos, participó también como ponente en las jornadas de Pastoral Juvenil y Vocacional de CONFER, destacando el “deseo de espiritualidad” que percibe en los jóvenes. “Hay un hartazgo de materialismo que invade y deja sensación de vacío. Y la Vida Religiosa encarna justamente el absoluto de Dios”, explicó en conversación con Vida Nueva, en la que también destacó la vida comunitaria y el compromiso con los pobres como claves de esta opción.

El salesiano mexicano también quiso destacar los efectos que el ejemplo como religioso jesuita está suscitando el papa Francisco. “Además de ser un gran apoyo por cómo está guiando la Iglesia, lo es también para la pastoral vocacional. Para mí es la encarnación hoy de lo que es ser religioso: un amor a Jesús capaz de todo, el compromiso por el Reino. Él encarna al religioso y es el mejor ejemplo que podemos proponer”, apunta Chávez.

Sin-título-11

En el nº 2.913 de Vida Nueva

 

LEA TAMBIÉN:

Compartir