Esperanza en que el Papa avive la reconciliación entre las dos Coreas

Reestablecer negociaciones sería “el más grande milagro” que podría obrar su visita

Oraciones en la zona desmilitarizada que separa las dos Coreas,  pidiendo la reunificación.

Oraciones en la zona desmilitarizada que separa las dos Coreas, pidiendo la reunificación.

JAVIER RODRÍGUEZ | El obispo de Cheju y presidente de la Conferencia Episcopal Coreana, Peter Kang-U-il, ha mostrado su gratitud personal al papa Francisco por “sacrificar sus vacaciones para dar este gran regalo al pueblo de Corea” que es su viaje al país del 14 al 18 de agosto, así como la esperanza de que la visita relance el proceso de reconciliación entre Norte y Sur.

Entrevistado por la agencia de noticias UCA, el prelado habla de las expectativas de la Iglesia en Corea ante el viaje del Pontífice, así como de la situación en Corea del Norte, la reunificación y de la situación actual de la Iglesia surcoreana.

En cuanto al tema de la reunificación, el prelado manifiesta su confianza en que la situación progresará en un futuro no muy lejano. “Estamos divididos sólo desde 1945, pero somos el mismo pueblo, tenemos la misma lengua y cultura”, explicó añadiendo que “si miramos la historia en su conjunto, los países que han adoptado la ideología socialista han colapsado y dejado de existir, con las excepciones de Corea del Norte y Cuba. Esto no puede continuar muchos años más“. Según Kang U-il:

El presidente de la Conferencia Episcopal Coreana.

El presidente de la Conferencia Episcopal Coreana.

El cambio no vendrá del exterior sino del interior, de hecho hay protestas en Corea del Norte, que no son publicitadas. Tenemos pequeñas señalas de resistencia en áreas rurales particularmente las más pobres. Los motivos que las impulsan no son políticos, sino relativos a la precariedad de la existencia. El hambre es un motor de la rebelión más poderoso que ideales de democracia y justicia.

En este sentido es significativa la nota enviada a la agencia Fides en junio en la que el secretario general de la Comisión para la Reconciliación dependiente de la Conferencia Episcopal de Corea, el padre Lee Eun-hyung, explica:

En esta situación de tensión, la carestía entre la población de Corea del Norte es probable que empeore, y también la economía de Corea del Sur está experimentando inconvenientes. La salida es el diálogo y los acuerdos, la colaboración y el intercambio.

La Comisión lleva a cabo desde 1999 un esfuerzo constante de colaboración con el Norte y el padre Lee ha efectuado tres viajes al otro lado de la “cortina de bambú” para encontrarse con representantes de la Catholic Association Joseon, única asociación de fieles católicos reconocida por las autoridades de Corea del Norte.

De las esperanzas depositadas en que el primer viaje de Francisco a Asia reavive el proceso de reunificación de las dos Coreas parece participar incluso la presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, quién anunció a mediados de julio la creación de un Comité para la Reunificación -inspirado en el proceso alemán tras la caída del Muro de Berlín- que echa a andar precisamente estos días.

Andrew Yeom Soo-jeong.

Andrew Yeom Soo-jeong.

Entrevistado por CBCP News, el arzobispo de Seúl, Andrew Yeom Soo-jeong, ya subrayó la necesidad de relanzar las negociaciones entre los dos países y manifestó el deseo de que la visita del Papa inspire un futuro encuentro entre el líder norcoreano y el presidente surcoreano, que sería el primero desde 2007. Yeom afirmó que es deseo del Papa que “el norte y sur de Corea vivan en armonía”, y que reconstruir las negociaciones sería “el más grande milagro” que podría obrar su visita.

A su vez, como informa el Consejo Mundial de Iglesias (WCC) y como viene produciéndose anualmente, el Consejo Nacional de Iglesias Coreanas (NCCK) y la Federación Cristiana Coreana llaman a católicos de Norte y Sur a rezar por la paz y la reunificación de la península coreana [ver oración completa]. Este año la oración se convoca para el día 10 de agosto ya que la iniciativa suele celebrarse el domingo anterior al día 15, aniversario de la liberación de Corea de la invasión japonesa y, paradójicamente, de su división. El año pasado estas mismas organizaciones impulsaron el Tren de la Paz con idéntica finalidad.

 

La situación interna en Corea del Sur

Preguntado por posibles divisiones internas entre el clero surcoreano, apuntadas en medios de comunicación que hablan de posiciones más “progresistas” y otras más “conservadoras”, el obispo de Cheju Peter Kang asegura que no se trata de diferencias doctrinales, sino de diversas “visiones” sobre el papel de la Iglesia: una que quiere estar más presente manifestándose sobre temas sociales y polítcos y otra que considera que ésta no es su tarea. Explica el obispo:

Stephen Kim Sou-hwan.

Stephen Kim Sou-hwan.

Hay que entender la historia de Corea en los años 60 y 70, en la época del cardenal Kim y otros obispos, muy activos contra la dictadura de la época y en favor de los derechos humanos. En ese tiempo nadie podía contradecir la política del Presidente, sólo la Iglesia católica. Los coreanos supieron que si querían escuchar la verdad tenían que ir a la iglesia, situación que se alargó décadas en las que obispos y sacerdotes fueron arrestados y torturados por ese motivo.

Aunque han pasado muchos años desde entonces, el presidente de la Conferencia Episcopal Coreana apunta que en la actualidad “la libertad de expresión casi no existe, dado que los medios de comunicación están controlados por grandes compañías, hay pocos periódicos que ejerzan de oposición y la situación no mejora”.

La otra gran cuestión que señala Kang U-il tiene que ver con la economía:

La mitad de la juventud coreana tiene trabajos inestables, lo que significa que podrían perderlos en cualquier momento, sólo cuentan con contratos temporales. Si bien la economía en Corea están bien desde el punto de vista de los grandes números, sólo las corporaciones se están enriqueciendo. Los pobres no mejoran en absoluto sus condiciones económicas, como también el Papa ha criticado en diversas ocasiones refiriéndose al sistema económico actual. El Evangelii gaudium es un ejemplo espléndido que el Papa nos ha transmitido.

En este sentido, el obispo subraya que los fieles coreanos conocen poco la doctrina social de la Iglesia, por lo que “el episcopado debería empeñarse más en este frente, lo que requerirá tiempo”.

 

El pop surcoreano da la bienvenida al Papa

Por otro lado, según informa el Korean Times, la comida que espera al Papa el viernes 15 en Daejeon tras celebrar la Santa Misa en el World Cup Stadium y donde Francisco compartirá mesa y mantel con jóvenes de 17 países (India, Bangladesh, Pakistán, Taiwán, Nepal, China, Japón, Mongolia, entre otros), contará con la presencia de la llamada “reina del pop coreano” BoA [web oficial], embajadora honoraria de unas jornadas que reunirán 2.000 jóvenes procedentes de 22 países asiáticos.

BoA (acrónimo de Beat of Angel), de nombre real Kwon Boa, canta en coreano, japonés, inglés, y ocasionalmente en chino mandarín, y goza de un gran éxito comercial tanto en Corea del Sur como Japón y de influencia en el panorama musical de toda Asia oriental.

Al profesar activamente la fe católica en un país donde imperan, por este orden, no creyentes, budistas y protestantes, la cantante surcoreana se erige en icono perfecto para las Jornadas de la Juventud Asiática.

A su vez, la canción oficial de la visita también ha sido realizada por una serie de personalidades del pop coreano (K-pop)

 

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