EDITORIAL VIDA NUEVA | Constituida en diciembre, ahora se ha dado a conocer la composición de los miembros de la Pontificia Comisión para la Tutela de los Menores. Se trata de ocho personas (cuatro hombres y cuatro mujeres) con experiencia para responder al doloroso fenómeno de la pederastia por parte de representantes eclesiales.
Pero, sin duda, un nombre ha despertado una especial atención. Se trata de la irlandesa Marie Collins, víctima de abusos por un sacerdote en 1960, cuando solo tenía 13 años. Con este gesto, Francisco va un paso más allá de los muchos y simbólicos que impulsó Benedicto XVI.
Ya no se trata solo de denunciar y consolar a las víctimas, sino de que ellas son las que contribuyen directamente a la solución. Y, lo mejor, dentro de la Iglesia.
En el nº 2.888 de Vida Nueva. Del 29 de marzo al 4 de abril de 2014.
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