Bajo el lema ‘Quien cree, nunca está solo’
De izq. a dcha., Antonio Cartagena, Camino Cañón y el obispo Esteban Escudero
J. FANDIÑO | El Foro de Laicos celebró, los días 23 y 24 de noviembre, su XXI Asamblea General Ordinaria bajo el lema Quien cree, nunca está solo, y durante la que se trabajó la encíclica del papa Francisco Lumen fidei, con especial atención al cuarto y último capítulo, “Dios prepara una ciudad para ellos”.
“Una invitación que, en nuestro caso, es una oportunidad para dar pasos en la experiencia de comunión que venimos construyendo en nuestro modo de compartir, de acoger y de comprender más a fondo la manera como los carismas laicales encarnados en nuestros movimientos y asociaciones son a la vez anuncio de la Buena Noticia para el mundo. El Espíritu sabrá conducir nuestro deseo de ahondar en la comunión hacia los frutos de novedad en la evangelización en la que todos estamos empeñados”, dijo la presidenta del Foro de Laicos, Camino Cañón Loyes, en sus palabras de bienvenida. Y en este sentido, hubo tiempo para compartir aquellas iniciativas que ponen de manifiesto aquello que se plantea en la Lumen fidei.
En el encuentro también estuvo presente el presidente de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar (CEAS), Esteban Escudero, así como el secretario de la citada comisión y consiliario del Foro de Laicos, Antonio Cartagena.
El primero, durante la Eucaristía del día 23, recalcó la importancia de “vivir la fe como encuentro amoroso, como conocimiento y como servicio y compromiso social, de tal manera que cada uno de nosotros ayude a configurar y hacer presente el Reino de Dios en la historia”.
Del mismo modo, se presentaron dos proyectos importantes: la participación en la asamblea del Foro de Laicos Europeo y la elaboración de un documento en torno al Sínodo sobre la Familia.
En el nº 2.873 de Vida Nueva
