Montserrat acoge el Encuentro Ibérico Monástico benedictino

participantes en el Encuentro Ibérico Monástico benedictino junio 2013

“Cabe descubrir la belleza y la centralidad de la fe”

participantes en el Encuentro Ibérico Monástico benedictino junio 2013

J. FANDIÑO | El Monasterio de Montserrat acogió recientemente –del 3 al 7 de junio– una nueva edición del Encuentro Ibérico Monástico benedictino, durante el cual se han tratado cuestiones de la vida de la Orden de San Benito en la Península Ibérica en el momento actual, justo cuanto se cumplen 50 años del Concilio Vaticano II. A este evento, en el que también se reflexionó sobre el Año de la fe y la nueva evangelización, asistieron 37 superiores de distintas comunidades (26 femeninas y 11 masculinas).

En la apertura del Encuentro, el abad de Montserrat, Josep Maria Soler, puso las bases para la reflexión y recordó el papel de los monjes y monjas de esta orden: “Para nosotros, discípulos de la escuela de san Benito, el ‘dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios’ nos conlleva resonancias de tres invitaciones fundamentales de la Regla. La primera: buscar a Dios de veras para amarle con todo el corazón, con toda el alma, con todas las fuerzas; la segunda: no anteponer nada al amor de Cristo; y la tercera: amar al prójimo anticipándose a honrarlo buscando lo que le sea más útil”.

Inmersos en los trabajos, Bernabé Dalmau, monje de Montserrat, pronunció una conferencia sobre el Año de la fe, durante la que destacó que, “para que la fe de los católicos no se reduzca a sentimientos y rutinas, se precisa un esfuerzo de transmisión pedagógica de contenidos, con el objetivo de saber en qué creemos los que creemos”. “Cabe descubrir la belleza y la centralidad de la fe. En un mundo y en una Iglesia marcados por la desarmonía y la fragmentación, el camino de la belleza de la fe es el único estímulo válido para proponer un mensaje cristiano capaz de testimoniar la belleza de la comunión”, añadió.

Por su parte, Juan Javier Flores, monje de Santo Domingo de Silos y rector del Pontificio Ateneo de San Anselmo (Roma), disertó sobre la nueva evangelización y la liturgia.

En otro orden de cosas, el día 6 de junio se procedió a la renovación de cargos del Encuentro Ibérico. Las votaciones significaron la elección de Lorenzo Maté, abad del Monasterio de Santo Domingo de Silos, como presidente y la de María del Rosario del Camino, abadesa del Monasterio de San Pelayo de Oviedo, como secretaria.

El Encuentro llegó a su fin con una visita al Monasterio de Sant Daniel de Girona, que este año celebra el milenario de su fundación.

En el nº 2.852 de Vida Nueva.

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